Julián Muñoz, de 76 años, ha muerto este martes 24 de septiembre. Fue ingresado en el HC Marbella International Hospital el pasado día 15. Estaba agotado y desgastado por la enfermedad, un "cáncer galopante", tal y como él mismo dijo el pasado mes de abril y contra el que llevaba luchando desde hace años. Muñoz, el que fuera alcalde de Marbella en los años que arrancaba este siglo, saltó a la fama por su noviazgo con Isabel Pantoja. Un amor mediático que hizo añicos su matrimonio con Mayte Zaldívar, que se convirtió en la mujer despechada, la que abrió la caja de Pandora del caso Malaya y la que tiró de la manta herida por el desamor. La relación del político y la artista comienza en 2003. Ese año, el primer edil rompe con Mayte, tras 30 años de unión y dos hijas, Elia y Eloísa Muñoz.
Su nombre completo es Julián Felipe Muñoz Palomo. Nació el 24 de noviembre de 1947 en El Arenal (en Ávila). Le llamaban Cachuli. Tras destaparse el caso Malaya, Muñoz fue detenido en julio de 2006 en la segunda fase, una inmensa trama de corrupción inmobiliaria e institucional, la más relevante registrada en España en estos últimos años. Un caso que también llevó a prisión a Isabel Pantoja por su implicación en la misma trama. El 21 de noviembre de 2014, Pantoja ingresaba en la penitenciaría de Alcalá de Guadaíra, en Sevilla, donde cumplió condena de dos años por blanqueo de capitales.
Durante su prisión preventiva, Muñoz fue condenado a más de 20 años se prisión por delitos de cohecho, malversación de fondos públicos y por prevaricación urbanística relacionada con la concesión de licencias ilegales durante los Gobiernos municipales del Grupo Independiente Liberal (GIL). Se le impuso una condena de 18 meses de prisión y 15 años de inhabilitación especial para empleo o cargo público. Muñoz salió de la cárcel el 17 de octubre de 2008 tras casi dos años y medio entre rejas.
Durante el tiempo que estuvo en Alcalá de Guadaíra, Julián acumuló enfermedades que menguaron su delicado estado de salud. Sufría una cardiopatía isquémica-hipertensiva, diabetes y una arteriopatía. En los últimos dos años en la cárcel, se vio obligado a visitar el hospital en 29 ocasiones. Debido al deterioro de su salud, en 2015, le fue concedido el tercer grado. Una decisión judicial que fue quedó anulada por la Audiencia de Málaga. Días después, la Audiencia le eximió de acudir a las sesiones del juicio por la trama de corrupción caso Fergocon, en el que está imputado.