Carlos Goyanes, esposo de Cari Lapique, ha fallecido este miércoles a los 79 años mientras dormía en su casa de Marbella. La inesperada noticia ha sumido a su familia en un profundo dolor. Su esposa se encontraba en Sotogrande en el momento del suceso, pero se desplazó inmediatamente a la ciudad al recibir la triste noticia. Los restos mortales del empresario ya se encuentran en el tanatorio San Pedro de Marbella, donde será despedido en una misa a las 20:30 horas.
La primera en llegar al velatorio ha sido Caritina, la hija mayor de Carlos. Vestida de negro y cogida de la mano de uno de sus hijos, la empresaria se mostraba completamente devastada y rompía a llorar sin poder evitarlo.

La viuda, Cari Lapique, llegaba poco después junto a su hija Carla. Cogidas del brazo y ocultando sus lágrimas bajo unas gafas de sol, han agradecido el pésame a los periodistas y vecinos que las esperaban.

Entre los amigos que han querido arropar a la familia estaban Javier Martínez de Irujo y su mujer, la diseñadora Inés Domecq, así como Alonso Aznar y su prometida, Renata Collado, o Álvaro Falcó con su esposa, Isabelle Junot.


La muerte de Carlos Goyanes ha sido completamente inesperada para familiares y amigos. El empresario se sometió a una intervención en 2023 para implantarse un marcapasos, pero la operación fue un éxito y afrontaba su vida con normalidad. A sus 79 años disfrutaba de una jubilación dorada, a caballo entre Madrid y Marbella, y volcado completamente en sus hijas y sus cinco nietos, a los que adoraba.
