Ágatha Ruiz de la Prada (63) ha empezado el año con una invitación que le hace especial ilusión. La diseñadora de moda estará el próximo 23 de marzo en El baile de la Rosa, uno de los eventos más importantes del Principado. La modista participará en la ceremonia de los Grimaldi después de que el pasado año pasara por el evento Isabel Pantoja (67). Eso sí, para llegar hasta ahí la tonadillera tuvo que mover algunos hilos, tal y como avanzó en su momento Informalia.
"Es un sueño casi cumplido. Estoy feliz porque siempre quise ir", ha declarado la ex de Pedro J. Ramírez a Semana. La diseñadora trabaja en su estilismo para su cita en la Salle Des Étoiles del Sporting de Montecarlo. No es un acto cualquiera: la familia real de Mónaco llega 50 años celebrando esta fiesta, en la que se reunen grandes personalidades de la sociedad europea.
"Estamos empezando a prepararlo. Todos los años hay un tema para el estilismo y este año todavía no me lo han dicho. Estamos en ello. También espero vestir a dos amigas mías que van", ha aclarado la marquesa de Castelldosríus.
La realidad de la 'invitación' de Isabel Pantoja
Por el Baile de la Rosa han pasado diversos rostros de nuestro país. Entre ellos, el director Pedro Almodóvar o el tandem artístico formado por Alaska y Mario Vaquerizo. Pero en marzo de 2023 le tocó a Isabel Pantoja. Ella misma lo anuncio en una exclusiva a la revista Hola.
La viuda de Paquirri pisó la ceremonia gracias a su amistad con Manel Dalgó, residente en Mónaco y muy bien relacionado en el Principado, y su marido Thomas Schmieder, que tiene en Montecarlo un apartamento en La Tour. Este artista escuchó la petición de la tonadillera de coincidir allí con su admirada Shirley Bassey, una de las grandes invitadas de ese año, y sus deseos se hicieron realidad.
"Hacer feliz a la gente me hace feliz a mí", nos contó el promotor del viaje de la cantante al corazón de la Costa Azul. Allí, la madre de Kiko Rivera compartió mesa con Bassey, aunque no llegó a tener contacto con la gran anfitriona del evento, Carolina de Mónaco. Quién sabe si Agatha tendrá mejor suerte.
Sea como sea, el hecho de que Isabel Pantoja se personara en el evento con aires de ejemplaridad se contradice con los escándalos que arrastra en nuestro país, donde es de sobra conocida su condena en el año 2014 por la Audiencia de Málaga por un delito de blanqueo de capitales. Su portada para el papel couché y su posterior paso por la cita monegasca se pueden tomar como un intento de suavizar ese pasado que todavía le pesa y que tanto dolor le ha causado durante décadas.
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