La estrategia de Luis Rubiales en su búsqueda de apoyos no tiene fin. Sobre todo, entre las mujeres de su familia. Es la opinión de Teresa Bueyes, que ha cargado contra Luis por la huelga de hambre de su madre, que se ha encerrado en una pequeña iglesia de Motril (Granada).
Bueyes también ha tenido palabras para las primas de Luis, quienes han cuestionado la declaración de la futbolista. En el programa Así es la vida ha revelado: "Me da asco que una mujer cuestione a otra mujer. A veces, una agresión no se manifiesta inmediatamente. En el caso de Jenni, en el momento en el que se produjo, estaba viviendo una ráfaga de emociones", en referencia a la intervención de las primas del dirigente del fútbol, que se han dejado la piel en su defensa.
La abogada ha recordado la comparecencia del ahora suspendido presidente de la RFEF, cuando mencionó hasta en dos ocasiones a sus hijas haciéndolas partícipes de su discurso ante los medios. Llegó a interpelarlas y deslizó: "No llores (...) Vosotras sí que sois feministas".
En su estrategia de buscar apoyos en las mujeres, Rubiales tiene ahora que lidiar con la postura de su madre, que ha decidido blindarse en la pequeña iglesia de Divina Pastora de Motril. Ángeles Béjar, en huelga de hambre, ha asegurado a EFE que su hijo "es incapaz de hacerle daño a nadie". Las primas de Luis, Vanesa y Demelza, también se han desahogado. Le han defendido a muerte e instan a Jenni: "¡Queremos que digas la verdad!"
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