"Estoy feliz porque Charise espere un niño. Y estaría encantado de ser el padrino del bebé". Esa es la actitud de Julio Iglesias Junior ante la noticia del embarazo de la que fue su esposa, Charisse Verhaert, que ha rehecho su vida con otro hombre después de divorciarse del hijo mayor de Isabel Preysler.
Este embarazo de la modelo holandesa coincide con otra noticia sorprendente: el noviazgo de Julio hijo con otra modelo, la cubana Ariadna Romero, divorciada y con un hijo, que no le acompaña estos días en Marbella, donde Julio asistió la noche de este domingo a la 14 edición de la gala Starlite, organizada por Antonio Banderas y Sandra García-Sanjuán.
El hermano mayor de Tamara Falcó y Ana Boyer esquivó con sonrisas y pocas palabras las preguntas sobre su nueva relación y aseguró que a él también le gustaría ser padre algún día, aunque piensa que se le está pasando la edad, 50 años.
A pesar de que su padre tiene una casa en Ojén, muy cerca de Marbella, su hijo se dejó invitar por la organización y se alojó en un hotel solo, sin quien parece ser su nuevo amor.
Presentado como una actuación especial dentro de la gala solidaria, Julio Jr. no entusiasmó al público con su música: interpretó versiones de célebres de su padre, desde Hey a Me olvidé de vivir. No fue muy acertado por parte de Julio José intentar reproducir el estilo, la voz y el tono del gran artista que es su padre, Julio Iglesias, sin tener su poderío ni su voz, suave y personalísima. Julio Iglesias Junior estaba algo afónico en Marbella y parecía cantar por puro tramite y algo tocado.
Por su parte, Antonio Banderas, junto a Nicole Kimpel, asistió a la fiesta haciendo un enorme esfuerzo. El actor malagueño está rodando en Londres una película, pero interrumpió su trabajo por un día con un madrugón impresionante y la mañana de este lunes ya vuela de nuevo a la capital británica para seguir el rodaje.
En esta gala solidaria han faltado grandes personajes internacionales y de la sociedad de Marbella, pero por la alfombra roja desfilaron caras habituales como Gunilla von Bismarck y su hijo Francisco Ortiz, Carmen Lomana, Paula Echevarría, Cayetana Guillén Cuervo, Carla Pereira, Miguel Ángel Silvestre y la que fue esposa de Silvester Stallone, Brigitte Nielsen, residente en la zona. Victoria Marichalar pasó fugazmente por el photocall, sin hacer declaraciones una vez más.
Sin embargo, la hija de la infanta Elena subió al escenario durante la subasta solidaria junto a Paula Echevarría. A los presentadores del evento, Carlos Latre y Valeria Mazza, se les ocurrió subastar los vestidos que llevaban puestos la propia argentina y la hermana de Froilán.
El de la actriz, firmado por Rosa Clará y el de la nieta del rey Juan Carlos, de un diseñador cordobés. Y así se hizo, los dos modelos fueron adquiridos en la subasta por personas que se los llevaron por varios miles de euros. El problema es que se trata de vestidos prestados, de los que ceden los diseñadores a las celebrities para que den nombre a la firma y luego se los devuelvan. ¿Qué dirán Rosa Clará y la firma cordobesa cuando se enteren de que sus vestidos han sido subastados sin su autorización a un alto precio y ellos se queden sin modelo y sin un céntimo?