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Kiko Rivera se pone a hacer ejercicio tras su gran susto de salud: "Queridos jóvenes, los excesos no son buenos"

No es la primera vez que se propone llevar una nueva vida marcada por el ejercicio y la alimentación saludable. No obstante, tras el último gran susto de salud que ha sufrido, Kiko Rivera se ha puesto serio de nuevo con el deporte. Prueba de ello, el vídeo que ha compartido a primera hora de este miércoles en su perfil de Instagram.

Después de que este lunes le practicaran un cateterismo, Kiko ha salido a caminar y trotar por las inmediaciones de su hogar en Castilleja de la Cuesta: "Buenos días, familia. Siguiendo las indicaciones del médico, salimos a caminar. Por la mañanita porque sino en Sevilla hace un calor que te mueres. Y aquí estamos. A cuidarnos y a seguir con mucha vida. Muy buenos días, os quiero".

Durante el paseo, el pequeño del alma también ha aprovechado para responder a las críticas que recibió tras su última publicación, en la que actualizó su estado de salud y cargó contra Telecinco: "Me estoy dando cuenta de que la gente sabe muy bien que hacer con tu vida, pero no tienen ni puta idea de lo que hacer con la suya. Muy curioso". 

Tras una caminata, el hijo de Isabel Pantoja se ha animado con la velocidad: "Estos últimos 20 minutos los vamos a hacer a trote, vamos a poner a ese corazón en condiciones que lo hemos castigado mucho y, queridos jóvenes, los excesos no son buenos. No soy el más indicado para decirlo, pero sí que lo estoy padeciendo. Así que cuídense mucho, os quiero".

Una vez en casa, ha explicado: "Ya estoy en casa. Primer día. Deporte superado. Ahora sí, ya duchadito. Fresquisto. Con un vasito de leche fresquita y nada, a continuar el día, un abrazo muy grande. Se os quiere". 

Tras ingresar el pasado sábado de urgencia en el hospital de Sevilla y someterse este lunes a un cateterismo, el DJ recibió el alta médica este martes 18 de julio y ya continúa con su recuperación en casa. Su mujer, Irene Rosales, no se ha separado de él ni un minuto y fue la encargada de conducir el coche que lo trasladó hasta su domicilio. En casa le esperaban con los brazos abiertos sus dos hijas, Carlota y Ana.

El ingreso hospitalario de Kiko, además, propició un acercamiento con su madre, a la que no veía desde hacía casi dos años. La tonadillera acudió al centro este lunes para acompañar a su hijo antes y después de su intervención y él le agradeció el apoyo públicamente y le pidió perdón por todo lo sucedido: "Gracias mamá por venir a verme, por pasar esa tarde juntos que para nosotros fue tan necesaria. Perdón, perdón por las formas, perdón por no saber controlarme y perder los nervios de una manera que no me caracteriza. Mi corazón necesita sanarse y para ello os necesito a todos y así va a ser". No es el único gran susto de salud que se lleva en los últimos tiempos. Hay que recordar que en octubre del año pasado sufrió un ictus leve. 

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