Marilyn Monroe: 60 años sin el mito sexual de Hollywood (y la obsesión por su imagen está intacta)

Han pasado 60 años desde la repentina muerte de Norma Jeane Mortenson, el 4 de agosto de 1962. La actriz, de mirada animal y sonrisa cautivadora, simboliza el esplendor de un Hollywood clásico, de una época de dorada de estrellas y títulos de leyenda, como Con faldas y a lo loco (Billy Wilder), con Tony Curtis y Jack Lemon; o La tentación vive arriba (Wilder), con Tom Ewell. Marilyn Monroe (MM) ahora tendría 96 años.

Marilyn lo fue todo. Modelo pin-up, actriz, cantante y bomba sexual. Su explosividad delante de la cámara la convirtió en emblema, en leyenda y en imagen de los años dorados de La Meca del cine. MM encarnó la revolución sexual de la mujer, empoderada y poderosa. Vivió y amó a quien quiso. También fue icono pop. Musa del visionario fundador del pop art Andy Warhol, la actriz sigue causando obsesión entre sus seguidores coleccionistas. Hace solo unos meses, se vendió en subasta su retrato por 195 millones de dólares (184 millones de euros), convirtiéndose así en la obra más cara del siglo XX. Se trata de Shot Sage Blue Marilyn, realizada en 1964 por el revolucinario artista de la moda, la música, el diseño gráfico y la fotografía.

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La estrella del cine nació en Los Ángeles el 1 de junio de 1926. Dejó atrás una infancia de hogares de acogida y orfanato y se casó a los 16 años con James Dougherty, escritor, policía en Los Ángeles y veterano de la Segunda Guerra Mundial. Fue el primero tres matrimonios en un camino de amores frustrados y mediáticos.

Para entonces ya era una leyenda. Sus contratos con la 20th Century Fox y con Columbia la llevaron a lo más alto de la fama. La filmografía de la rubia de Hollywood reúne títulos históricos como Los caballeros las prefieren rubias, Río sin retorno o Cómo casarse con un millonario, La jungla de asfalto y Eva al desnudo. En 1953 posó desnuda para Playboy.

Su segundo matrimonio llegó en 1954, tras darle el "sí, quiero" a la súper estrella béisbol Joe DiMaggio. La relación se rompió 9 meses después, aunque la amistad entre ellos duraría hasta la muerte de la actriz. 

Los años 50 fueron un punto de inflexión en su carrera: Nueva York, Truman Capote, clases en Actors Studio bajo la dirección de Lee Strasberg, y Marlon Brando. Adiós al falso mito de la "bella tonta" que se había construido alrededor de su imagen. La comedia Bus stop le supuso su nominación a los Globos de Oro. Después llegó Con faldas y a lo loco, de Wilder, con Lemon y Curtis. Todo un éxitazo de taquilla, que le valió a Monroe el Globo de Oro a la mejor actriz de comedia (foto inferior).

Una de las imágenes más icónicas de la interprete pertenece a La tentación vive arriba, dirigida por Wilder en 1955. Situada sobre las rejillas del metro, en el 586 Lexington Avenue, en Manhattan, Monroe controla su falda, que vuela al paso de la brisa del tren. El vestido de cóctel blanco, con top de cuello halter, del diseñador William Travilla, ha quedado para la historia del cine.

Tras separarse de Di Maggio, la actriz conoció a La Voz, Frank Sinatra. Nunca llegaron casarse, pero el crooner confesó en muchas ocasiones su amor por la actriz. En 1956 contrajo matrimonio con el dramaturgo Arthur Miller, con quien se marchó a Londres para rodar junto a Sir Laurence Olivier El príncipe y la corista.

Su relación intermitente con John F. Kennedy también llenó ríos de tinta. El 19 de mayo de 1962 fue invitada por JFK, que celebraba su 45º cumpleaños en el Madison Square Garden. En un momento de la noche, la intérprete entonó el seductor y memorable "happy birthday, Mr. President", recordado como uno de los momentos más cinematográficos de la cultura pop.

MM tuvo que hacer frente a sus adicciones y a sus trastornos del estado de ánimo. El 4 de agosto de 1962, a los 36 años, murió a causa de una sobredosis de barbitúricos en su casa de Los Ángeles.