Ernesto de Hannover, esposo de Carolina de Mónaco (siguen casados), ha sido ingresado de nuevo en un hospital madrileño después de acudir de urgencia el pasado domingo 25 de mayo.
El príncipe alemán se dirigió a la clínica Ruber Internacional de la capital donde quedó ingresado, según ha publicado Semana. Se trata de una nueva hospitalización de Ernesto de Hannover después del último episodio en la misma clínica, donde permaneció 18 días.
En aquella ocasión, el royal sufrió un empeoramiento en su estado y pasó una semana en la UCI bajo estricta vigilancia médica, lo que hizo temer por su salud. Tal y como publicamos, según fuentes hospitalarias, la grave situación del alemán no tuvo entonces "nada que ver con la cadera", en referencia a la operación que se le practicó en diciembre de 2024 tras una aparatosa caída. Recibió el alta el 21 del pasado abril. Salió del Ruber Internacional de la capital por su propio pie. Lucía buen aspecto y al abandonar el centro médico mostraba una leve sonrisa como señal de alivio por regresar a casa. El príncipe iba acompañado por su novia, Claudia Stilianopoulos, que estuvo muy pendiente de él durante toda su estancia hospitalaria, por su hijo Christian de Hannover y su nuera Alessandra de Osma.
Desde hace años, la salud del príncipe ha sido motivo de preocupación constante. Su historial médico se complica con sus conocidas adicciones al alcohol y otras sustancias, que lo han llevado en repetidas ocasiones a centros de desintoxicación sin éxito duradero. Su comportamiento errático y sus episodios violentos en público lo convirtieron en un personaje habitual de la prensa sensacionalista, pero en los últimos meses los titulares giraban más hacia su salud que hacia sus escándalos.
