Juan Carlos I disfruta de la vela en Sanxenxo con un dispositivo que monitoriza su estado de salud

Este fin de semana, Juan Carlos I disfruta de su gran pasión por la vela en Sanxenxo, donde se está celebrando la segunda regata de la clase 6 metros. Hace unos días lo vimos en su llegada al Real Club Náutico de la ciudad pontevedresa, donde se subió a bordo de El Bribón para participar en el entrenamiento de las regatas. Sin embargo, hubo un detalle que no pasó desapercibido: mientras saludaba a la prensa con la mano, se pudo ver que llevaba en su dedo el codiciado Oura Ring, un anillo tecnológico que monitoriza su salud las 24 horas del día.

Fabricado en Finlandia, el accesorio es capaz de medir parámetros como la temperatura corporal, el ritmo cardíaco, la calidad del sueño, las calorías quemadas y la actividad diaria. Datos que se recogen a través de sensores de alta precisión y se sincronizan con una aplicación móvil para ofrecer un seguimiento completo del bienestar del usuario. Y mientras el padre de Felipe VI disfrutaba de su jornada en el Real Club Náutico de Sanxenxo, la infanta Elena le acompañó una vez más.

La elección de este dispositivo no resulta casual. A sus 87 años, y tras varios episodios de salud delicada, don Juan Carlos parece confiar en este tipo de herramientas para mantenerse activo, especialmente en actividades físicas como la navegación.

Este dispositivo, que también utiliza el príncipe Harry, tiene un precio que oscila entre los 300 y los 900 euros, dependiendo del modelo. En el caso del emérito, noticia en las últimas semanas por sus demandas a Miguel Ángel Revilla y Corinna Larsen, su uso refuerza la imagen de alguien que, pese a su retirada de la vida pública, sigue muy pendiente de su estado de salud y de mantener un estilo de vida activo.