El chamán Durek Verret, yerno de los reyes de Noruega Harald y Sonia y marido de la princesa Marta Luisa de Noruega, ha respondido largo y tendido a las acusaciones de un hombre de 49 años, de nacionalidad sueca, que aseguró al diario Se og Hor de Noruega haber sufrido una agresión en una sesión de curación chamánica. Los hechos habrían tenido lugar en 2015. Ahora Durek ofrece su versión en una entrevista a la revista Verdens Gang de la que se hace eco Point de Vue.
Fue en noviembre del año pasado cuando Joakim acusó a Durek de presunto agresor sexual. Ambos se conocieron hace diez años en Nueva York, según el testimonio de la presunta víctima, quien quedó fascinado por el enorme carisma del chamán, relataba el diario sueco Se og Hør. El hombre, casado y padre de dos hijas, comenzó entonces una amistad con Durek, hasta que la relación desembocó en celos y control por parte de Verret. En las sesiones chamánicas, el hombre aseguró haber sufrido tocamientos sexuales e insinuaciones.
"Me han comparado con el príncipe Andrés, con Jeffey Epstein y con P. Diddy. Las acusaciones son infundadas y falsas", explica Derek mientras su mujer, Marta Luisa, lanza sus quejas contra el diario que levantó el caso: "Imprimen cualquier cosa, siempre que sea negativo, sin corroborar si es correcto". Y añade que no tienen "consideración" hacia ellos "como familia".
Además, tras el escándalo, Durek ha asegurado a la citada revista que se preocupa por "el consentimiento": "Siempre lo obtengo antes de hacer algo a mis clientes". La hermana de Haakon es la primera que defiende a su marido a capa y espada: "Si Durek hubiera sido un agresor nunca estaría con él". Han sido las palabras de la royal que, por amor, renunció a los privilegios de su condición de princesa.