Evasión

Con pedidos de la Princesa de Mónaco y de Verstappen: la alta pastelería francesa llega al barrio de Salamanca

Fuente: Galia Pastelería

María León

Un aroma a café y a alta repostería envuelve la calle del General Díaz Porlier, en el Barrio de Salamanca. Aunque si se cerrara los ojos podría parecer que nos encontramos en alguna de las famosas pastelerías que se encuentran en París, tenemos la suerte de tener de poder visitar en Madrid Galia Pastelería. Se trata del primer establecimiento de dos veinteañeros, Gia McKilen Olszowska y Florent Tortot y aunque apenas lleva un par de meses abierto, ahí dentro hay auténticas delicias.

Ingredientes de alta calidad

Si por algo se caracteriza Galia es por la altísima calidad de su materia prima. Aquí no escatiman a la hora de conseguir los ingredientes y que sean productos frescos es una auténtica prioridad. La mantequilla viene de Normandía, la vainilla de Madagascar y el pistacho de Sicilia, entre otros. Lo que queda claro es que en cada bocado, Galia sabe a lo mejor de lo mejor.

Por supuesto, uno de los clásicos y de las grandes estrellas de esta pastelería es el croissant artesanal de Florent Tortot. Para poder conseguirlo hay que llegar pronto, pues las 40 unidades que hacen al día vuelan en las primeras horas del día. Tampoco pueden faltar el pain au chocolat, sus eclairs, la cookie, los bizcochos de autor y cualquiera de sus tartas.

Con aroma a limón, chocolate y canela

En este establecimiento se encuentran los mismos dulces con los que algunas celebridades han caído rendidos. Entre ellas se encuentra la Princesa Chàrlene de Mónaco y el piloto de Fórmula 1 Max Verstappen. Entender su fama es muy sencillo, tan solo hay que probar su carta durante algún desayuno, brunch o merienda. En todos ellos se encuentra el inconfundible aroma del limón y los matices de la canela o del arándano.

En Galia también disponen de una larga lista de café de especialidad, además de otras opciones como tés, chai latte, matcha, chocolate y zumo de naranja. Lo que no todo el mundo sabe es que, como buena pastelería de origen francés que es, se puede encontrar vinos entre su carta: vino blanco, tinto y rosé.