España se encamina a reimpulsar la industria de la minería
- El MITECO lanza a audiencia pública su Plan de Acción de las Materias Primas Minerales
- El plan pretende actualizar la ley de minas y aprobar un Plan de Exploración Minera
- España es el gran yacimiento de tierras raras que tanto necesita Europa
Sergio Guinaldo
El Gobierno ha dado el que probablemente sea el mayor primer paso hacia el reimpulso de la actividad minera en los últimos 50 años. La semana pasada, el Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico (MITECO) inició el trámite de audiencia pública de su propuesta para un Plan de Acción de las Materias Primas Minerales 2025-2029; un plan con el que, a grandes rasgos, pretende incentivar al sector, aunque sin apartar la vista del reciclaje, de la sostenibilidad y de la autonomía estratégica.
En materia económica, el plan provisional está prácticamente vacío, ya que no involucra ninguna partida económica a falta de alegaciones y de la aprobación de los Presupuestos, aunque sí incluye los 400 millones de euros del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) que ya se han destinado a la recuperación de suelos y espacios.
A nivel regulatorio, las propuestas no han sido más ambiciosas debido a que muchas de las actuaciones en materia minera competen a las comunidades autónomas. Precisamente por ello, uno de los puntos más interesantes del plan se localiza en la segunda medida, y consiste en la aprobación de una nueva ley de minas —la que está actualmente en vigor data del año 1973—. Para este asunto, el plan propone adaptar el reparto de competencias entre el Estado y las comunidades autónomas conforme a la legislación europea, así como integrar en ella un enfoque de circularidad y autonomía estratégica.
Del mismo modo que el plan resulta algo descafeinado en algunos aspectos, también es esperanzador y disruptivo para el sector, dado que prácticamente ha estado fuera de la agenda política durante décadas. "El Plan busca un 'enfoque 360' para la gestión de materias primas, transformar un sector que mantiene a 30.000 empleos apostando por la identificación de las necesidades, el reciclaje y la circularidad, la trazabilidad de las materias primas que importamos, el conocimiento del recurso existente en España y la recuperación y restauración sostenible de espacios", indicó en su presentación Joan Groizard, secretario de Estado de Energía.
El anuncio no es casual, sino que tiene una importante connotación estratégica dado el actual contexto internacional, en el que la lucha por conseguir minerales críticos se acrecienta a pasos agigantados. De hecho, el texto propuesto está en clara sintonía con el reciente Reglamento de materias primas fundamentales de la Unión Europea (CRMA, por sus siglas en inglés) así como con el nuevo Plan de Acción de Economía Circular, actualmente en elaboración.
Según las estimaciones que maneja el Gobierno, la extracción de recursos a nivel global se duplicará en el periodo comprendido entre 2017 y 2060, principalmente como consecuencia del incremento del uso de recursos por habitante.
Así, el Gobierno pretende con este plan aprovechar mejor los recursos con los que cuenta España, ya sea mediante nuevas explotaciones o mediante explotaciones finalizadas que se podrían reaprovechar, además del reciclaje y la circularidad. Medidas, eso sí, aderezadas con toques sostenibles y respetuosos con el medio ambiente.
España es el único productor europeo de estroncio y sepiolita, que es el primer productor de la unión de espato-flúor y de yeso. Del mismo modo, es el primer productor internacional de pizarra de techar, así como el segundo en cuanto a rocas ornamentales y mármol.
Sin incluir las alegaciones que recibirán a lo largo de las próximas semanas, el plan tiene una extensión de 38 puntos, aglutinados en cuatro vectores: la eficiencia y la economía circular, la gestión sostenible de las materias primas minerales en la industria extractiva, garantizar la seguridad de suministro y fomentar la industria de carácter estratégico.
38 puntos de actuación
Al margen de la hipotética nueva ley de minas, otro de los puntos de mayor interés del plan reside en el desarrollo de un Programa Nacional de Exploración Minera 2025 - 2029 de colaboración público privada. Aunque este programa contiene varios apartados, en definitiva pretende saber con más exactitud de qué materias disponemos en España, ya sea en yacimientos aún por explotar o en yacimientos ya explotados.
Para los primeros, antes de realizar nuevos sondeos y calicatas, el Programa propone realizar un nuevo análisis sobre la infinitud de muestras que se conservan en la litoteca de sondeos del Instituto Geológico y Minero de España (IGME), para encontrar materias que, si bien en su día no se consideraron interesantes, hoy podrían serlo. Esta técnica se podría combinar con estudios geofísicos y detección remota sin intervenir en el suelo, tales como gravimetrías, radiometrías, magnetmetrías, y métodos sísmicos o electromagnéticos. En cambio, para los segundos —las minas ya explotadas—, el plan también propone revisar qué materias primas aguardan en escombreras y balsas, en busca de materias de interés que no se hayan aprovechado.
A nivel empresarial, el plan incluye el desarrollo de programas de formación para atender a la futura supuesta demanda de empleos cualificados que requerirá el sector, o la confección de un listado detallado con las necesidades de materias primas que tiene cada uno de los sectores industriales.
Destaca también la implantación de mecanismos de trazabilidad del origen de las materias primas, la realización de un inventario con los huecos mineros de los que disponemos para su puesta en valor (para, por ejemplo, el vertido de excedentes de obras o para desarrollar actividades socioculturales).
A nivel medioambiental, el sexto punto propone simplificar la modificación y revisión de los planes de restauración de las minas explotadas. La medida busca modernizar estas labores, de tal forma que se contemplen nuevos usos compatibles (ocio, cultura, patrimonio) o la conservación de la biodiversidad adaptada a la mina.
El almacén del IGME-CSIC
Dentro del nuevo Plan Nacional de Exploración Minera se propone realizar un nuevo análisis de las muestras que se conservan en la Litoteca del Instituto Geológico y Minero de España IGME-CSIC.
Este almacén contiene casi 11.000 (10.979) muestras de suelo de todo el país, obtenidas a partir de testigos de sondeo y exploraciones geoquímicas de proyectos de investigación. De cada una de estas muestras, el instituto del CSIC realizó hace años un análisis para saber qué materias contenía cada una, otorgando así una radiografía completa con los indicios de buena parte del país. Sin embargo, aquellos análisis, ahora anticuados, estaban supeditados a las necesidades mineras del momento, obviando en muchos casos materiales que hoy en día sí son de interés.
Por tanto, realizar un nuevo análisis de toda esta base de datos podría destapar nuevos yacimientos de interés, sin necesidad de realizar nuevas perforaciones en el suelo.