Weston Hill negocia con cinco fondos el 'rescate' de las clínicas de iDental

El culebrón de iDental, la cadena odontológica de bajo coste, sigue adelante. Tal y como han explicado fuentes cercanas a la compañía, Weston Hill Capital -propietarios del 70%- está negociando la entrada de un fondo para solucionar los problemas que atraviesa actualmente la compañía. Su objetivo es que ésta siga siendo viable para mantener los puestos de trabajo y dar continuidad a los tratamientos que estaban realizando hasta la fecha.

Por el momento, en las negociaciones hay cinco candidatos, tanto nacionales como internacionales, que están muy interesados en hacerse con una parte de la compañía, también motivados por la atomización del sector. De hecho, los accionistas mayoritarios -representados a través de los hermanos Garrido- llevan meses negociando la entrada de un fondo al considerar que es un negocio fácilmente exportable a otros países.

Es más, llegaron a tener conversaciones avanzadas con el fondo estadounidense Cerberus, pero finalmente la operación se estancó después de que el fondo detectara supuestas irregularidades en la gestión del equipo directivo anterior. En este sentido, hace apenas unos días los accionistas mayoritarios decidieron cesar al hasta la fecha consejero delegado del grupo, Luis Sans, y propietario de una participación minoritaria. Tras los últimos acontecimientos, han retomado las negociaciones con Cerberus, teniendo una oferta no vinculante del fondo sobre la mesa.

Indicios de mala gestión

Las razones a las que aludieron desde Weston Hill para tomar esta decisión se basaron, tal y como explicó elEconomista el pasado viernes, en "indicios de irregularidades y de mala gestión". Además, denunciaron que están impidiendo "torticeramente una transición ordenada para el nuevo órgano de administración". De hecho, fuentes cercanas a la compañía han explicado que están estudiando emprender posibles acciones legales a raíz de estos acontecimientos.

En los últimos días, iDental ha sufrido importantes problemas derivados de impagos en la plantilla y cierre de clínicas que han dejado a clientes sin tratamiento. A la espera de la resolución del conflicto, la compañía tiene previsto poner en marcha un call center para atender a los afectados.