Fainé avisa de que la guerra "tiene capacidad para alterar el rumbo de la historia"
- Cree que su impacto económico será "soportable" si no se alarga en el tiempo ni se extiende a más países
- Avisa que la banca deberá "perfeccionar" las palancas para generar ingresos y reducir costes para combatir la inflación
- Las entidades de CECA destinaron 778 millones a Obra Social en 2021 y beneficiaron a 25,3 millones de personas
Eva Contreras
El presidente de la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA), Isidro Fainé, aventuró este martes que la guerra "tiene capacidad para alterar el rumbo de la historia". Por un lado apuntó que "el impacto económico será soportable, sin ocasionar graves daños a nivel de la economía mundial" si no se alarga en el tiempo ni se extienda a otros países.
Pero por otro lado subrayó que añade "complejidad a un panorama económico que ya de por sí era muy atípico", lo que exigirá gestionarlo y, en el caso específico, de la banca apuntó que deberá potenciar ingresos y reducir costes "para combatir la inflación". Su diagnóstico lo realizó durante la celebración de la 115ª Asamblea General de CECA donde, entre otras materias se hizo balance de la contribución del sector a la Obra Social (778 millones de euros el pasado año) y de las medidas desplegadas para ayudar también con la crisis de Ucrania.
Fainé advirtió de que la invasión militar de Ucrania por parte de Rusia "no es un episodio más en la larga serie de conflictos que salpican la historia y la geografía mundial", pero también abre oportunidades como "que las tres grandes potencias económicas y socio-políticas de nuestra era (EEUU, Europa y China) sean capaces de limar asperezas, e incluso de reforzar los lazos que nos unen".
En un contexto más amplio expuso que también complica un escenario donde, mientras persisten las dudas sobre la evolución de la pandemia, se han unido otras como la situación de la inflación o si EEUU y China serán capaces de "convivir de forma constructiva". "Todos deseamos una competencia dura pero transparente, entre las dos superpotencias y a la vez una cooperación mutua, en aquellos aspectos básicos e imprescindibles para mantener el orden mundial", agregó.
Valoró que puede confirmar el "declive" de los populismos en las próximas elecciones en países como Francia, Hungría, Brasil y EEUU, lo que debería "reducir el riesgo de que las políticas sean erróneas a nivel global" , además de acelerar el proceso de integración de la Unión Europea. Advirtió también, en todo caso, sobre los desafíos que se presentan, por ejemplo, en materia de envejecimiento o desigualdades sociales, donde la Obra Social de las entidades de CECA tiene "muchísimo campo donde actuar".
El banquero reconoció que el escenario de subidas de tipos será positivo para la banca, aunque persisten las dudas sobre su efecto, cuál será su velocidad y qué pasará con la inflación. Aquí, reparó en que si se mantiene "en niveles moderados" será un escenario "excelente" para el negocio financiero, pero traerá volatilidad si los inversores piensan que los bancos centrales van rápidos en exceso o lentos.
Optimizar la estructura productiva
En todo caso refirió que las entidades deben "perfeccionar" las palancas de las que disponen para "potenciar la generación de ingresos, y para ganar en eficiencia porque los márgenes pueden empeorar con el proceso inflacionista que se espera". Y en concreto, apuntó a "perseverar en la senda ya iniciada de optimización de la estructura productiva", al tiempo que "se refuerza la diversificación de las fuentes de ingresos" y el uso creciente de canales y plataformas digitales.
Fainé realizó también un balance de las tareas de CECA, subrayando que el pasado año se sentaron "las bases para la colaboración público-privada en la implementación del Plan Next Generation" y reclamó al Gobierno que dé mayor protagonismo a la banca en su ejecución, además de poner en valor la Obra Social.
Obra Social
Las entidades de CECA destinaron 778,5 millones de euros a 51.750 proyectos y actividades de Obra Social en 2021. Supone aumentar un 0,8% la dotación frente a 2020, y beneficiaron a 25,3 millones personas o un 2,7% más. El balance de su compromiso social lo han compartido en la Asamblea de la CECA y en una reunión de Comisión de Fundaciones y Obra Social, integrada por los máximos responsables de las entidades. Se trata del primer inversor social privado del país y, según fuentes del sector, ha hecho que sea "la envidia de todos nuestros colegas europeos y mundiales" por el esfuerzo desplegado.
Las mismas fuentes detallaron que esos casi 780 millones suponen un 29% de las dotaciones a servicios sociales y promoción social en los Presupuestos Generales del Estado en un ejercicio de pandemia como fue 2020 y el 15% en el presupuesto actual. Del total de la inversión, un 41,32% fue a proyectos de acción social, un 25,06% a educación e investigación; el 18,27% de cultura y patrimonio y un 12,20% a proyectos para fomentar el empleo y el desarrollo local.
Las entidades redirigieron proyectos y recursos para priorizar la situación creada por la pandemia, que había afectado "de forma especial a los perceptores de rentas más bajas, a la gente con condiciones laborales más precarias", y de forma específica a "los jóvenes, las mujeres y el colectivo de inmigrantes", y se mantuvo en 2021.
Por colectivos, un 59,90% de los proyectos fueron, precisamente, a segmentos más frágiles como las personas en riesgo de exclusión social (recibieron un 32,58% de la inversión total), niños y jóvenes (39,85%), mayores de 65 años (11,84%) y emprendedores (5,50%). En conjunto suponen 14,09 millones de los 25,3 millones de beneficiarios totales, censo que crece además un 9,28% frente a los 12,9 millones de 2020.
De la suma total destinaron además 135,76 millones a diferentes actuaciones para ayudar a paliar el Covid como compra de productos básicos, mascarillas y pantallas, respiradores o a proyectos de investigación.
Las entidades han aprovechado para echar la vista atrás con un balance de los últimos ocho años, desde que se aprobó la Ley de Cajas de Ahorros y Fundaciones Bancarias. Desde entonces su Obra Social ha sumado 6.172 millones de euros en inversión en 776.500 actividades de las que se han beneficiado 253,34 millones de personas, de los que 139 millones están englobados en esos colectivos específicos.