Empresas y finanzas
China frena la venta de materias primas y deja a España sin pintura
- Las fábricas españolas apenas reciben nada y lo que llega lo hace a precio alto
- Las compañías hacen malabares para seguir manteniendo la actividad
Javier Ruiz-Tagle
La dependencia industrial de Europa frente a China es una de las lecciones que ha dejado la crisis del coronavirus. Sin embargo, está muy lejos de ser una asignatura aprobada. Muchos son los sectores que miran hacia Asia esperando que lleguen las materias primas para poder trabajar, algo que en la industria química, y en concreto en la pintura, ha dejado de ocurrir. Las primeras alarmas se encendieron a finales del año pasado pero fue a lo largo del primer trimestre de 2021 cuando la presión comenzó a ser asfixiante. Hoy hay una escasez muy grande de productos básicos y los que llegan lo hacen subidos en una ola de especulación enorme.
El problema comienza a surgir cuando China decide que su país (y algún otro del entorno) necesita prácticamente todo lo que allí se produce. Es entonces cuando las exportaciones caen. "Asia no exporta nada de producto porque dicen que están creciendo", dice David Romero, consejero delegado de Global Paint, una empresa situada en Cáceres. "Siempre hemos vivido especulaciones, pero ahora afecta a todas las materias primas porque China se está quedando con todo", añade Manuel Roldán, director general de Nupinsur, en Jaén. La situación, lejos de mejorar, es peor a cada día que pasa. Además, según estos protagonistas, no tiene visos de resolverse a corto plazo.
Los productos que más faltan, y que además son esenciales para fabricar las pinturas, son la resina epoxi, el disolvente o el isocianato. Este último ha tenido una subida de precio del 100%, según explica Romero, mientras que la resina ha pasado de costar 3,35 euros a 5,5. "Pero en general ha subido todo y no menos del 18%", añade el director general de Nupinsur.
También el transporte. Por problemas marítimos, los container se hacinaban en los puertos de China sin que hubiese barcos que los recogieran. "El resultado fue que el transporte de un solo contenedor pasó de 1.500 dólares a 7.000", explica Romero.
La escasez de materias primas que provoca la falta de exportación china se une a la escasa producción que existe en Europa. Una de las principales razones, según dice Roldán, es que la producción de muchos de los materiales que se necesitan para hacer las pinturas son contaminantes, motivo por el cuál se dejaron de hacer. Pero aún existen algunas. "En Europa las plantas se ponen bajo la condición de fuerza mayor para no suministrar, algo que ha existido siempre pero que antes solo se evocaba para tragedias como un terremoto, por ejemplo", añade el consejero delegado de Global Paint.
Aunque no se puede saber a ciencia cierta, existe también la sensación de que estas fábricas también están modulando su suministro en función de las variaciones de precio de las materias primas.
La situación de estos dos directivos en sus fábricas es de ahogo. "Estamos haciendo malabares para no parar la producción pero hay líneas en las que no ha habido otro remedio. Hoy no podemos cumplir todos los pedidos pero estamos aguantando. Prevemos conservar el empleo pero las cuentas de resultados se están deteriorando y este año haremos menos inversiones", explica Romero.
La realidad de Roldán es muy similar. "Estamos viviendo la tormenta perfecta. Íbamos a hacer el suelo del Estadio Olímpico de Sevilla para la Eurocopa y hemos perdido la operación. Estamos regateando la situación... Tengo a 40 personas en la fábrica y estoy optando por ir a trabajos menos rentables de momento para no dejarles sin trabajo, pero no sabemos cuánto podremos seguir así", relata. Las cifras, además, lo dejan claro: ha tenido 300.000 euros en pedidos que no ha podido servir.
Malos datos de la patronal
La situación que cuentan estos dos directivos, en línea con la que relatan otros agentes intermedios, se corrobora con los datos que maneja la patronal Asefapi. "Después de varias semanas con escaladas de precios de gran magnitud y falta de suministro, la situación sigue siendo difícil. En resinas y acetatos hay gran escasez. Más del 85% de las empresas manifiesta no recibir lo necesario para trabajar correctamente. Preocupa especialmente la falta de isocianatos", aseguran en la organización.
Productos como pigmentos, dispersiones y emulsiones siguen en la lista de gran escasez. Disolventes, acrilatos y alcoholes han mejorado el suministro, aunque para el 40% de las empresas sigue sin llegar todavía lo necesario.