Empresas y finanzas

Abengoa reformula el plan de viabilidad para salvar el grueso del negocio

  • La entrada en concurso de la matriz dificulta la continuidad de los proyectos
Planta de Abengoa

Javier Mesones, Rubén Esteller

Abengoa Abenewco 1, la sociedad controlada por Abengoa que ostenta el grueso del negocio y los trabajadores del grupo, está reformulando el plan de viabilidad que elaboró en mayo de 2020 el equipo del entonces presidente Gonzalo Urquijo.

Una readaptación obligada por las nuevas circunstancias de la compañía, que a la falta de avales y financiación para contratar y licitar de los últimos meses ha sumado en las últimas semanas, a raíz del concurso de acreedores de Abengoa SA, dificultades crecientes con los proveedores, que exigen en muchas obras pagos por adelantado.

La reestructuración de la deuda, encauzada a través del denominado Plan Vellocino, no llegó a ratificarse

El plan de viabilidad de 2020, que valoró KPMG, se acompañaba de una refinanciación que los principales acreedores aprobaron el 6 de agosto y que debía hacerse efectiva a más tardar en diciembre. Sin embargo, la reestructuración de la deuda, encauzada a través del denominado Plan Vellocino, no llegó a ratificarse por los obstáculos con que se topó por parte de la Junta de Andalucía, primero, y del Gobierno Central, después. Una situación que llevó al consejo de administración de Abengoa a solicitar el 18 de febrero el concurso de acreedores de la sociedad, que está en todo caso prácticamente vacía de actividad y acumula una deuda próxima a los 1.000 millones de euros.

En este contexto, el consejo de administración de Abenewco 1, que es el mismo que el de Abengoa, los acreedores y el Gobierno están tratando de buscar una solución que garantice el futuro de la compañía y evitar así la quiebra de la sociedad que realmente tiene los activos y los proyectos, y de la que dependen cerca de 14.000 trabajadores.

Para ello, un primer paso es tratar de conseguir una financiación puente para mantener un nivel de actividad hasta que, llegado el caso, se alcanzara un acuerdo para la reestructuración definitiva, aunque dada su situación hasta ahora ha resulatdo imposible. Asimismo, la empresa trabaja en readaptar el plan de viabilidad. Los meses de espera sin que finalmente se aprobara la refinanciación han dañado drásticamente la actividad del grupo, que apenas ha podido contratar, dada la falta de financiación y avales. Además, ha provocado que haya tenido que renunciar a algunos proyectos o acumular retrasos en los trabajos. Asimismo, el perímetro de la empresa ha cambiado, con la salida de activos como las plantas A3T, en México y Xina Solar One, en Sudáfrica.

La firma está separando los proyectos entre los que son viables, los neutros y los que abandonará

Con estos condicionantes, la ingeniería que ahora preside Juan Pablo López-Bravo está perfilando un nuevo plan que, según indican fuentes al tanto del proceso, contiene "cambios sustanciales", con una "actualización del negocio concesional" y que se asienta "sobre una base más pequeña". A este respecto, la firma está separando los proyectos entre los que son viables, los neutros y los que abandonará.

Sobre la base del plan adaptado la firma enfrenta el objetivo más complejo, la reestructuración financiera. Tras fracasar Vellocino, que contemplaba la inyección de hasta 250 millones con aval del Instituto de Crédito (ICO) y 300 millones de avales con garantía del Cesce, Abenewco 1 y sus acreedores buscan alternativas. La opción de que el ICO se mantenga como avalista se ha diluido al entrar la matriz en concurso, aunque hay interpretaciones jurídicas diferentes. De este modo, las miradas apuntan a la SEPI. Por ahora no se ha solicitado información para el rescate, según fuentes próximas al proceso.

La idea discurriría por solicitar 250 millones, pero con esta vía los acreedores tendrían que renunciar a parte del capital de Abenewco. De momento, ha conseguido el plácet de casi el 100% de los proveedores para extender el plazo de negociaciones hasta el 31 de marzo. En paralelo, los bancos han flexibilizado su posición y han mantenido los primeros contactos con AbengoaShares, los accionistas minoritarios de Abengoa, para escuchar sus propuestas.


EY, administrador concursal

Este viernes, 12 de marzo, concluye el plazo para que las empresas presenten sus propuestas a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) para convertirse en el administrador concursal de Abengoa SA, la matriz del grupo andaluz que solicitó el concurso de acreedores el pasado 18 de febrero. El supervisor remitirá una terna de ofertas al juez que instruye el proceso, que será quien decida finalmente la firma elegida. EY figura como el candidato con mayores opciones, toda vez que cuenta con una elevada capacidad para afrontar un concurso de esta magnitud y, además, ya ha pilotado el concurso de otras filiales de Abengoa como Simosa IT, según fuentes del mercado. En los próximos días deberá conocerse la resolución.