Empresas y finanzas

Brisa, último movimiento en el mapa de carreteras de la UE

  • Fondos y competidores quieren comprar la concesionaria lusa, en un nuevo paso de consolidación
Imagen de una autopista. Foto: EFE.

Javier Mesones

Brisa, la concesionaria de autopistas portuguesa, protagoniza la última operación corporativa de un sector que, en función del desenlance del proceso, dará un nuevo paso significativo hacia su consolidación en Europa.

La compraventa del mayor operador de carreteras de Portugal se erige en la transacción más significativa en ciernes en el continente europeo, con un valor de empresa que el mercado eleva a entre 2.500 y 3.000 millones de euros. La batalla por tomar el control del grupo luso está servida y ya ha convocado a grandes fondos internacionales, algunos ya con presencia en la Unión Europea en el ámbito de las autopistas, y también a varias de las mayores concesionarias, como Abertis, Globalvia y Roadis.

Los vendedores seleccionarán alrededor de la mitad de las propuestas para que presenten ofertas vinculantes.

José Mello y Arcus sacaron al mercado el 80% de Brisa el pasado mes de otoño. La operación ha suscitado un elevado interés en un mercado que cuenta con una sólida capacidad de financiación y en el que las oportunidades son escasas.

Así, además de las españolas, se hallan en la carrera por hacerse con el control de Brisa el fondo de pensiones holandés APG, máximo accionista de la concesionaria española Itínere; el fondo galo Ardian y la italiana Gavio, que conformaron en el verano de 2018 la sociedad Nuova Argo Finanziaria; el fondo australiano Macquarie; los fondos de pensiones canadienses CDPQ y CPPIB; la japonesa Marubeni y un consorcio de firmas chinas, según Mergermarket.

Los vendedores seleccionarán alrededor de la mitad de las propuestas para que presenten ofertas vinculantes. El objetivo es culminar la venta, con las autoridades pertinentes, en la segunda mitad de 2020.

De call centers a carsharing

El de Brisa se revela como el último gran movimiento en las autopistas europeas. La compañía gestiona 1.628 kilómetros en Portugal y, además, cuenta actividad en áreas de servicio, sistemas de cobro, call centers, inspección de automóviles, soluciones tecnológicas para movilidad, inversiones o carsharing

La transacción dará continuidad a otras operaciones de relieve cerradas en los últimos dos años que han propiciado la fusión de operadores y, por tanto, una creciente consolidación en el sector. La principal fue la oferta pública de adquisición (opa) sobre Abertis por parte de Atlantia y ACS.

Globalvia protagonizó unos años antes, en 2015, uno de los movimientos corporativos más relevantes en el sector

Con la compra, concluida en diciembre de 2018, la concesionaria italiana, que tomó el 50% más una acción de la española, se convirtió en el mayor operador del mundo. En paralelo al proceso de Abertis, Ardian y Gavio sellaron una alianza, materializada en la creación de Nueva Argo Finanziaria, convertida en la tercera operadora del mundo con más de 4.000 kilómetros de autopistas, sólo por detrás de Atlantia y la francesa Vinci.

A finales de 2018, Globalvia se hizo con el 40% de Itínere con el objetivo de alcanzar una participación mayoritaria y consolidarla. Una meta que hasta ahora no ha podido conseguir por la judicialización del proceso.

Globalvia protagonizó unos años antes, en 2015, uno de los movimientos corporativos más relevantes en el sector, con la compra del 100% de la empresa por parte de los fondos de pensiones PGGM, OPTrust y USS a FCC y Bankia. Roadis, antigua Isolux Infrastructure, también fue adquirida al 100% por el canadiense PSP en 2016.

Refuerzo de cartera

Para Abertis, la compra de Brisa -en cuyo capital estuvo hasta 2012- le permitiría, al igual que la de la mexicana RCO, anunciada en octubre pasado, reforzar su cartera en un contexto de pérdida de activos en España por el final de las concesiones (Aumar y Acesa). Mientras, Globalvia y Roadis, que ya tienen una presencia destacada en Portugal, sellarían con la lusa la mayor operación de su historia e incrementarían su tamaño hasta prácticamente doblarlo..

En 2018, Brisa ganó 158 millones de euros y obtuvo un resultado bruto de explotación (ebitda) de 554 millones. En el mismo ejercicio, el ebitda de Abertis fue de 3.549 millones, el de Globalvia de 298,3 millones y el de Roadis de 3.93 millones.