El selectivo nacional tiene por delante cerrar el hueco abierto con Europa del 6,3% desde que se iniciara en junio la escalada independentista en Cataluña. Tiene más potencial que Europa, por encima del 11%, lo que le llevaría a superar los máximos de 2017, y llegar hasta los 11.350 puntos. Compañías como Telefónica e Inditex que presentan más de un 20% de recorrido alcista.
Si en algún momento pasan los nubarrones del independentismo debería abrirse paso todo un abanico de color en el Ibex 35. El temporal separatista de finales de 2017, no sin daños y con fractura respecto a Europa del 6,3% desde la convocatoria del referéndum ilegal en junio, le coloca en una posición privilegiada. Los expertos confían en que el índice alcance dentro de doce meses niveles de 11.200 puntos, unos 1.000 por encima del cierre de ayer, lo que implica una revalorización del 11,3%, y no muy lejos del que debería ser el primer objetivo: los máximos de 2017, en los 11.135 enteros. Y a ello habría que sumarle la rentabilidad por dividendo, que se mantendrá próxima al 4% en 2018, entre las mayores de Europa.
De cara a 2018, en el Ibex pesan más las ventajas que los riesgos, que siguen viniendo, por cierto, de la incertidumbre política aquí, en España, y también en América Latina, donde se celebrarán elecciones en Brasil, México y Colombia. La bolsa española es la mejor posicionada de la eurozona, según los analistas, básicamente por cuatro motivos: la normalización monetaria en Europa, que lleva aparejada una subida de los tipos de interés –no esperada hasta 2019, pero que puede empezar a descontarse por el mercado–; el impacto que ésta tendrá sobre el sector financiero, y el Ibex es el índice más bancarizado de Europa, con un peso del 30%; el crecimiento de la economía nacional –por encima del 3%– y del beneficio de las compañías; e, incluso, la reforma fiscal –ya aprobada– en EEUU y el futuro plan de infraestructuras que impactará en positivo a muchas firmas nacionales, entre ellas, Grifols, Acerinox o Ferrovial (estas dos últimas dentro del índice Eco10 –selectivo de ideas de calidad creado por elEconomista con el consenso de 50 firmas de análisis–).
"Este año, el Ibex merece mención especial porque se ha quedado más barato que otros índices, especialmente en un contexto de normalización de los tipos de interés", apuntan desde BBVA AM. El índice, según el consenso de mercado, cotizará a un multiplicador de ganancias de 13,7 veces el próximo año, con un descuento del 3% respecto al EuroStoxx. Estos niveles están "cerca de los mínimos de los últimos cinco años", según Crédit Suisse, "y le convierten en el tercer mercado más barato" de entre las principales plazas mundiales. No obstante, desde Renta 4 señalan como posible riesgo la vuelta de "la volatilidad a niveles más normales ante la retirada de los estímulos". El índice del miedo, el estadounidense Vix, cotiza en mínimos históricos, unos 10 puntos por debajo de la media de 20 puntos básicos en los que ha oscilado desde 2005.
"No hay un exceso de complacencia en mercado, hay optimismo pero cuadra con la situación económica", aseguran desde AndBank. La previsión que manejan los expertos de Renta 4 va desde un crecimiento del BPA (beneficio por acción) del 9% de las empresas del Ibex en un escenario base hasta el 20% en un contexto más optimista, aunque reconocen que 2018 será el año de la consolidación del nuevo ciclo, con un crecimiento menor de las ganancias.
Desde el año 2006, las compañías españolas han distribuido entre sus accionistas 350.000 millones de euros, el equivalente al 33% del PIB nacional, según datos de BME. La importancia del dividendo es tal que podría elevar el rendimiento anual del Ibex en el año hasta un 4%. BBVA AM calcula que el Ibex con dividendos alcanzaría una subida del 17,6% en 2018 y es una buena alternativa para los inversores más conservadores. "El retorno por dividendo sigue siendo atractivo respecto a otras alternativas, en particular frente a la renta fija", sostienen Santander AM, que recalcan que, "en un horizonte de remuneración al ahorro prácticamente nulo", se refuerza la idea de tener en cartera valores con altos dividendos. Un clásico ejemplo de ello es Telefónica, que presenta, además, el segundo mayor potencial de todo el EuroStoxx 50, con un recorrido del 26,3%, hasta un precio objetivo que sitúan por encima de los 10,4 euros.