Apenas cambios significativos en las bolsas europeas en una sesión marcada por la festividad de Wall Street y en la que lo más destacable ha sido ver como el Ibex 35 ha comenzado a presionar la zona de resistencia que presenta en los 9.750-9.800 puntos, que es la que debe batir de cara a que podamos confiar en un rebote sostenible más allá del muy corto plazo.
Mientras no supere este rango resistivo no se alejará el riesgo de seguir asistiendo a una corrección bajista más profunda hacia los mínimos del año.