Situación de corto plazo:
Durante las últimas semanas los principales índices norteamericanos consolidan posiciones en un movimiento que tiene visos de ser una simple pausa previa a una continuidad alcista. Después de fracasar en su intento de retomar esa tendencia alcista y perderse soportes de corto plazo durante la semana pasada todo apunta a que esa consolidación podría ser más amplia, tal y como dibujamos en el chart adjunto.
En ese gráfico se puede ver como el S&P 500 (SP500.CH) aún podría tener margen de caída hasta la base del canal que discurre por los 2.300 puntos y no se puede descartar una profundización hacia los 2.278 puntos, cuyo alcance supondría un ajuste del 38,20% de Fibonacci de toda la subida de los últimos meses. Hasta ahí hay un margen de caída del 2-3 por ciento y si eso sucede nos encontraríamos con una oportunidad para buscar una ventana de compra en el mercado norteamericano.
Situación tendencial:
La tendencia alcista que definen los principales índices norteamericanos desde el año 2008 / 2009 se mantiene del todo vigente y para que exista un cambio dentro de la misma es preciso que una próxima caída perfore soportes como son los 1.810 puntos del S&P 500, los 15.500 puntos del Dow Jones Industrial (DJI.NY) o los 4.100/4.200 puntos del Nasdaq Compuesto (NASDAQ.NQ).
En plazos medios ya supondría un importante deterioro alcista si se pierden los mínimos que se marcaron en los futuros estadounidenses el pasado 9 de noviembre, tras el pánico inicial que supuso la elección de Trump como presidente de los EEUU. Estos mínimos se han convertido en el soporte clave que no debería de ser perdido en un contexto alcista en próximos meses. Por tanto, el soporte clave que hasta ahora se encontraba en los mínimos del Brexit ya puede subirse a los mínimos de Trump. Mientras estos mínimos, tales como son los 2.027 del futuro del mini S&P 500 o los 4.555 del futuro del mini Nasdaq 100, no sean perdidos, seguiremos confiando en una continuidad de la tendencia alcista de Wall Street.