La banca impulsa su beneficio en España un 31%, hasta 3.514 millones
- Mejora sus cuentas en el primer trimestre por ventas de la cartera de deuda
Fernando Tadeo
La banca firmó en España el segundo mejor resultado en toda la crisis en el primer trimestre del año. Las entidades lograron un beneficio de 3.514 millones a finales de marzo, lo que supone un crecimiento del 31,2% más con respecto al mismo periodo del ejercicio anterior. La suma es más de la mitad de las ganancias que cosecharon en el conjunto de 2016, según los datos del Banco de España.
El sector aprovechó en el arranque del ejercicio la buena situación del mercado para vender parte de su cartera de deuda pública y anotarse ingresos con los que compensar la caída de los márgenes de intereses fruto de la caja actividad crediticia y el euribor en negativo. Por ejemplo, el stock de hipotecas registró en los tres primeros meses una caída superior al 4%, a pesar del impulso en la nueva contratación.
En algunas entidades, el resultado de operaciones financieras -en el que se engloban los ingresos por la desinversión de deuda- representa más del 50% de los beneficios, lo que demuestra la importancia de esta partida en la mejora del conjunto del sistema en nuestro país.
Menores provisiones
Otro motor de las cuentas, como viene siéndolo en los últimos tiempos, es la reducción en la necesidad de provisiones para cubrir pérdidas por la recuperación del sector inmobiliario y la actividad económica. La morosidad continúa descendiendo de manera paulatina y ya se sitúa por debajo del 10%, umbral desconocido desde antes del rescate a las cajas de ahorros en mayo de 2012.
El volumen total de dotaciones que acumula el sector supera ligeramente los 122.000 millones de euros, de los que algo más de la mitad está destinada a cubrir los riesgos crediticios. Salvo excepciones, como el Popular, las entidades cada vez requieren menores provisiones y no se descarta que en los próximos años, una vez se cierren todos los cambios regulatorios, puedan liberar una parte importante de la hucha, como ocurrió en la recuperación de mediados de los años noventa. Entonces, hasta un 70% de las ganancias procedieron de esta práctica.
Los banqueros esperan que las cuentas vayan de menos a más este ejercicio y en 2018 pueda empezar a normalizarse el entorno con la vuelta del euribor al terreno positivo, algo que permitiría una subida de los márgenes operativos. Los expertos prevén que esto suceda a principios del próximo año.
Hasta entonces, los bancos intentarán mantener el control de los costes y conseguir ingresos en comisiones -por la comercialización de fondos de inversión, planes de pensiones y seguros- para elevar la rentabilidad sobre recursos propios (Roe), que aún está muy por debajo de lo que exigen los inversores. El mercado exige un Roe cercano al 10% y este parámetro apenas sobrepasa el 5% en la actualidad.