Banca y finanzas

Los 'Bizums' de Noruega y Polonia se unen al consorcio de España, Italia y Portugal

  • El plan es interconectar después a las plataformas los pagos de Dinamarca, Finlandia y Suecia

Eva Contreras
Madrid,

La carrera por conformar el gigante europeo de pagos coge velocidad. Noruega y Polonia han decidido unirse al consorcio formado por el español Bizum, el italiano Bancomat, y el portugués MB Way (SIBS), y en pocos meses podrían realizarse los primeros pagos instantáneos entre ciudadanos de los seis países -Bizum conecta a España y Andorra-. Su alianza tendrá lugar por medio de la interconexión del esquema noruego Vipps MobilePay y de la polaca Blik, y "es muy posible que se sumen más billeteras", desveló este jueves el director del Bizum noruego, Rune Garborg.

Y es que bajo la alianza noruega conviven dos aplicaciones, Vipps y MobilePay, que arrancarían en Noruega, pero también operan en Dinamarca, Finlandia y Suecia, y la intención es que sus usuarios pronto puedan enviar también dinero al resto de países conectados gracias al consorcio. "Esta colaboración puede suponer una enorme simplificación para más de 100 millones de europeos", expuso el directivo, poniendo cifra a la magnitud que puede alcanzar la futura red.

La capacidad de atraer esquemas gemelos cobra especial relieve en un momento en el que se han tendido puentes entre los dos grandes consorcios que competían hasta hace poco por gestar el futuro proyecto paneuropeo de pagos imponiendo su modelo. Se han iniciado conversaciones entre la European Payments Alliance (EuroPA), que capitanea Bizum, junto a los sistemas italiano y portugués, y a la que ahora se unen los nuevos países; y la Iniciativa de Pagos Europea (EPI, por sus siglas en inglés), impulsora del esquema Wero con un funcionamiento prácticamente idéntico, pero impulsada por los bancos de Alemania, Francia y Bélgica.

El consorcio EuroPA apostó desde el inicio por ensamblar los sistemas nacionales, respetando su autonomía; frente al proyecto de EPI consistente en construir un único esquema continental. Los bancos socios de la alianza EPI, de la que la banca española también formó parte en su fundación, pero se descolgó, se abrieron públicamente hace poco a explorar la vía de las interconexiones, y actualmente la analizan ambos consorcios.

El acuerdo de interoperabilidad en el que participa Bizum suma unos 50 millones de usuarios -con cobertura a 186 entidades- antes de la futura conexión de los esquemas noruego y polaco. Va más avanzado que Wero porque opera sobre esquemas vigentes en los diferentes países.

El pasado mes de abril arrancaron los pagos instantáneos entre particulares, que serán los primeros que echen a rodar en la interconexión con las plataformas de Noruega y Polonia. Son soluciones que tienen que ir habitando progresivamente los bancos adheridos a cada esquema y la previsión es que la función para particulares esté plenamente operativa en junio para los primeros cuatro países, con la intención de incorporar también pagos a comercios este año. Los esquemas de los dos países nuevos seguirá la misma hoja de ruta, con la previsión de efectuar pruebas en pocos meses y estar operativos en 2026.

La plataforma Vipps MobilePay cuenta y agregará más de 12 millones de usuarios en Noruega, Dinamarca, Finlandia, Suecia, Groenlandia y las Islas Feroe; y la polaca Blik otros 18,5 millones. La billetera de pago digital Wero proyecta a su vez conectar a todos los bancos socios en pocos meses con una hoja de ruta parecida: primero habilitar operaciones entre particulares, después en comercios pequeños para dar luego el salto a los de mayor dimensión.

La aproximación entre ambos esquemas ocurre frente a las crecientes tensiones geopolíticas, que apremian la necesidad de ganar soberanía en una infraestructura tan crítica como son los pagos. El empeño del Banco Central Europeo (BCE) en poner en marcha el euro digital para garantizarse una autonomía que acaba de cuajar en el sector privado, pese a que el proyecto lleva décadas sobre la mesa, también ha favorecido que la industria acelere los trabajos.