Banca y finanzas
CaixaBank ganó 5.787 millones en 2024, un 20% más y anuncia otro programa de recompra de acciones
- El banco cierra el mejor año de su historia impulsado por una intensa actividad comercial y tipos de intereses elevados
Matteo Allievi, Ángel C. Álvarez
Valencia,
Dulce cierre de año para CaixaBank. El banco elevó en 2024 un 20,2% su beneficio, hasta los 5.787 millones de euros, impulsado por el crecimiento de la actividad comercial y tipos de intereses elevados, según ha comunicado este jueves. El resultado obtenido supera los 5.667 millones estimados por el consenso de analistas publicado en la web de la entidad. Se trata del mejor año de su historia, al batir el récord de 5.226 millones contabilizado en 2021 gracias a los 4.300 millones del fondo de comercio negativo generado por la fusión con Bankia. Asimismo, el banco ha anunciado un programa de recompra por el valor máximo de 500 millones, completando el plan de distribución contemplado en el plan estratégico 2022-2024 para alcanzar el objetivo de 12.000 millones de euros.
En términos de retribución al accionista, el banco ha notificado también que distribuirá un dividendo complementario en efectivo de 0,2864 euros brutos por acción, con cargo a los beneficios del ejercicio 2024, que abonará en abril. Con el pago de este dividendo, junto con el dividendo a cuenta pagado el pasado noviembre, la remuneración al accionista correspondiente al ejercicio 2024 será equivalente al 53,5% del beneficio neto consolidado. Asimismo, la entidad ha agregado que mantendrá el mismo plan de dividendos para 2025, es decir, una distribución en efectivo de entre el 50% y el 60% del beneficio neto consolidado, a abonar en dos pagos, en noviembre de este año y en abril del próximo.
El consejero delegado del banco, Gonzalo Gortázar, valoró el ejercicio 2024 como "muy positivo" que cierra un ciclo en el que el banco alcanzó todos los objetivos del plan estratégico 2022-2024: crecimiento de la actividad comercial, mejora en la calidad de servicio, rigurosa gestión del riesgo y recuperación de una rentabilidad razonable.
Retención de más capital
Ante la fortaleza del ejercicio 2024, el banco se encamina a este año con más confianza de poder alcanzar los objetivos que acaban de presentar en su plan estratégico 2025-2027, según ha señalado Gortázar en una rueda de prensa. "Las recompras de acciones seguirán su papel, pero como esperamos un crecimiento, vamos a necesitar retener más capital en la entidad para apoyarlo. No nos hemos comprometido en una cifra concreta de devolución de capital porque no queremos que suponga un freno a la hora de conceder crédito y de crecer. Pero sí esperamos tener la capacidad de recomprar acciones", ha agregado.
El ratio de máxima calidad CET1 se situó en el 12,2% frente al 12,4% registrado el año anterior, tras descontar el impacto del quinto programa de recompra de acciones, actualmente en ejecución, y del sexto, aún no iniciado. El banco presidido por Tomás Muniesa fijó en un 12,25% el umbral del capital para distribuciones adicionales en 2025.
El margen de intereses, que mide la diferencia entre la rentabilidad de los activos y los intereses pagados por los pasivos, creció un 9,8% frente al año anterior, hasta los 11.108 millones, sostenido por unos tipos de interés elevados. Eso sí, en los últimos tres meses de 2024, disminuyó casi un 2% comparado con el trimestre anterior, por efecto de la relajación de política monetaria implementada por el Banco Central Europeo (BCE).
Los ingresos por servicios, que incluyen la gestión patrimonial, los seguros de protección y las comisiones, se elevaron un 4,6%, hasta los 4.995 millones. En concreto, los ingresos por gestión patrimonial aumentaron un 12,1% y los ingresos por seguros de protección un 4,2%, aunque las comisiones cayeron un 1,1% en el periodo, debido a la aplicación de programas de fidelización.
Efecto de bajada de tipos
Para este año, la entidad prevé una bajada de un solo dígito en el margen de intereses por el efecto de la bajada de tipos y una subida de entre bajo y medio dígito en los ingresos por servicios. El director de contabilidad, Matthias Bulach, ha afirmado que la visión del banco sobre los tipos de interés está en línea con la perspectiva del mercado. "Es decir, tres bajadas seguras del BCE en los próximos meses y una posible cuarta que no está del todo descontada. Por tanto, los tipos se quedarían en torno al 2,25-2% y el euríbor en niveles actuales con una ligera caída durante el año", ha dicho.
Con respecto a la posible renovación de algunos de los consejeros, cuyos mandatos caducan en la próxima junta, Gortázar ha dicho que no le corresponde hablar de la composición del consejo: "Es una decisión que corresponde a los consejeros, al propio consejo y a la junta. Las propuestas de cambio se harán cuando se convoque la junta". "Es importante tener un número elevado de consejeros independientes. En el momento de la fusión, los accionistas principales tomaron el acuerdo de tener dos consejeros por parte de Criteria y uno por parte del FROB. No tenemos ninguna expectativa de que eso cambie", ha indicado.
A la pregunta de por qué el nuevo presidente de la entidad, Tomás Muniesa, que reemplazó a José Ignacio Goirigolzarri a partir del 1 de enero, no estuvo en la presentación de resultados, Gortázar ha afirmado que "no se le quiere esconder" y que "le veremos próximamente en la junta general de accionistas". "La tendencia en Europa es que los resultados sean presentados por el equipo ejecutivo y que el presidente se ocupe del consejo y de la junta de accionistas", ha anotado.
Los costes operativos subieron un 4,9% de forma interanual, hasta los 6.108 millones. La buena evolución de los gastos sobre los ingresos permitió a la entidad rebajar su ratio de eficiencia al 38,5%, cuando al cierre del 2023 se situó en 40,9%. Para este año, la entidad espera que esta métrica se sitúe ligeramente por encima del 40%, es decir, que empeore algo, debido al hecho de que los costes aumentarán algo más que los ingresos, mermados por la bajada de tipos.
La rentabilidad sobre patrimonio tangible (RoTE) aumentó del 15,6% al 18,1%, muy por encima del objetivo del 16% establecido por el banco para este año y en línea con el plan estratégico 2025-2027 presentado el pasado noviembre.
La gestión del riesgo mantuvo la senda de la mejora. La exposición dudosa descendió hasta los 10.235 millones, con una ratio de morosidad limitada al 2,6% y una hucha de dotaciones sobre esos activos improductivos del 69%. El coste del riesgo, el cociente entre las dotaciones para insolvencias y la cartera de créditos totales, estuvo en un 0,27%. El objetivo para 2025 es mantenerlo por debajo del 0,30%.
La cartera sana de crédito mostró un aumento del 2,2% en el año, con una contribución positiva tanto de empresas como de particulares, situándose en 351.511 millones de euros a cierre de diciembre. La nueva producción de crédito mostró un comportamiento positivo en todos los segmentos: lideran las hipotecas, con una subida del 53%, seguidas por el crédito a empresas, que creció un 24% y por el crédito al consumo, que se elevó un 13%.
Los recursos de clientes alcanzan a finales de 2024 los 685.365 millones de euros, tras registrar un aumento del 8,7% con respecto a diciembre de 2023. Los que más subieron con fuerza fueron aquellos en gestión patrimonial, un 11,7%, apoyados tanto en suscripciones netas en fondos de inversión y seguros de ahorro como por efectos de mercado positivos. Los depósitos de clientes se incrementaron un 6,4%, mientras que el resto de recursos un 7%.
Preguntado por el nuevo impuesto a la banca, Gortázar ha incidido en que hasta que la base imponible sean los ingresos, es, "por definición, un impuesto al crédito que compagina muy mal con el desarrollo de la inversión empresarial". "Entre las cuestiones que tenemos que abordar es reforzar España como un destino atractivo para la financiación y poner un impuesto así no es una buena idea. Incentiva las entidades a prestar fuera de España. Tenemos que tener un debate sereno al respecto", ha aseverado.