El sector financiero mira al extranjero para crecer y fortalecerse
- Entidades como Santander o BBVA tienen una importante parte de su negocio en otros países, y otros como Bankinter o Sabadell siguen creciendo fuera de España
Lucía Gómez, Aitor Caballero Cortés
La gran banca española pulverizó en 2023 récords de resultados sumando 26.088 millones de euros, lo que supone un aumento del 27% interanual. Estas cifras se explican, en gran parte, por el impulso del negocio doméstico y de otros países de Europa como consecuencia de la subida de tipos de interés que comenzó en 2022, y en otros países latinoamericanos. Por ello, las entidades financieras tienen grandes oportunidades en el extranjero para crecer y fortalecerse en los próximos ejercicios.
Así, por ejemplo, hay dos grandes grupos financieros españoles con importante presencia internacional: Banco Santander y BBVA. El primero de ellos se ha convertido en un referente internacional, con presencia en tres grandes áreas de Norteamérica, América del Sur y Europa. Con más de 166 millones de clientes en todo el mundo, Santander aspira a seguir creciendo y conseguir 200 millones para el año 2025.
Para ello, entre otras cosas, desembarcará con su banca retail a través de Openbank en México y Estados Unidos, dos gigantes americanos en los que busca instaurarse. Este movimiento se producirá en la segunda mitad de este 2024 con una plataforma tecnológica diseñada internamente en Santander "con precios de fintech", señalan desde la entidad. Openbank da actualmente servicio a más de 2 millones de clientes en Europa, con presencia en países como España, Portugal, Alemania y Países Bajos y cuenta con 18.000 millones de euros en depósitos, liderando la banca digital del continente.
Con el lanzamiento de Openbank en Estados Unidos, el grupo usará íntegramente por primera vez su plataforma tecnológica en la nube, señalan desde Santander. El lanzamiento de Openbank acelerará la ejecución de la estrategia de crecimiento de Santander en el gigante americano con la captación de depósitos para aportar liquidez a su filial de financiación de automóviles.
El segundo gran ejemplo de entidad global con sede en España es BBVA. El banco que encabezan Carlos Torres y Onur Genç tiene una posición muy relevante en México y Turquía a través de Bancomer y Garanti, respectivamente. Así en el país americano, BBVA consiguió un récord de 1.441 millones de beneficio durante el primer trimestre de este año, con un crecimiento del 3,6%, y es uno de los grandes motores del transatlántico de origen vasco.
BBVA está ensanchando actividades en Estados Unidos con la irrupción en la asesoría de inversión para clientes internacionales de altos patrimonios, con foco inicial en clientes latinoamericanos. Se suma a la oferta internacional de gestión de patrimonios que ya ofrece la entidad en Suiza y España.
En otro orden de cosas, Banco Sabadell también tiene presencia internacional, si bien su tamaño es más reducido. Así, cuenta con negocio en México y Reino Unido, a través de TSB, y una oficina también en Miami (Estados Unidos). TSB supuso una pesadilla para Banco Sabadell hace unos años pero tras varios ajustes e "importantes dolores de cabeza", como reconocieron sus propios directivos, la situación se recondujo y de cara a los próximos años será uno de los motores del banco. La filial británica supondrá un importante impacto positivo para estabilizar las cuentas del grupo en los próximos años gracias a su Caterpillar -oruga en inglés-, que hace que no se noten todos los beneficios del aumento de los tipos de interés a corto plazo, sino que reparte esa ventaja en el tiempo y lo extiende durante cuatro años más.
Bankinter avanza
El caso de Bankinter merece párrafo aparte. La entidad que ahora encabeza Gloria Ortiz crece en España al tiempo que avanza en puntos concretos de su estrategia internacional. Así, y tras el éxito de su filial en Irlanda, Avant Money, el banco anunció hace unas semanas que Bankinter daba un paso más en su estrategia de negocio en el país y busca ampliar su catálogo de servicios desde las hipotecas y los créditos al consumo a otro tipo de productos financieros, como los depósitos o la inversión. Para ello, puso en marcha los trámites administrativos para la constitución de la nueva sucursal con la que el banco operará en ese país bajo marca propia.
Bankinter empezó a operar en Irlanda en mayo de 2019 a través de Avant Money, una sociedad dedicada al negocio de los préstamos al consumo y regulada por el Banco Central de Irlanda como entidad de pago, entidad de crédito minorista y distribuidora de seguros. En septiembre de 2020, Bankinter incorporó a esa estrategia el negocio hipotecario. A cierre del primer trimestre de 2024, la cartera hipotecaria en Irlanda ascendía a 2.400 millones de euros, un 53% más que hace un año.
Este nuevo movimiento para crecer en el país se llevará a cabo en varios pasos: primero, la compra por parte de Bankinter a su filial Bankinter Consumer Finance de la totalidad de las acciones que componen el capital de Avant Money, convirtiéndose así Bankinter en accionista único de la sociedad en Irlanda. A posteriori, constituirá Bankinter Irlanda, a la que se adscribirán todos los activos, pasivos, derechos y obligaciones y que servirá como pata clave para ampliar las operaciones al mercado de depósitos y ahorro de clientes.
Con esta operación, Bankinter tiene como objetivo aprovechar la actual estructura operativa de Avant Money, reduciendo así el coste y mejorando la eficiencia, señalan desde la propia entidad. Además, aspira a optimizar la experiencia de los clientes irlandeses con una propuesta amplia de productos y servicios financieros, y seguir diversificando las fuentes de ingresos que sustentarán el crecimiento futuro del grupo.
La adquisición de la sociedad irlandesa supuso para Bankinter un importante crecimiento internacional. La entidad incorporó así 130.000 clientes y una cartera de 290 millones de inversión en tarjetas revolving, o de pago aplazado, y 105 millones de euros en préstamos personales. Actualmente, la cartera de inversión de Avant Money, la marca actual con la que la entidad opera en Irlanda, es de 3.300 millones de euros, de los que 2.400 millones son hipotecas, y el resto, 900 millones de euros, Consumo, con una ratio de morosidad en conjunto del 0,34%. El beneficio antes de impuestos de este negocio en este primer trimestre del año fue de 9 millones de euros. La ratio de eficiencia de esta actividad es del 43,3%. Actualmente, la entidad presta servicios a, aproximadamente, 200.000 clientes en la República de Irlanda.
El conjunto de las entidades financieras españolas tienen por delante una oportunidad clave para desarrollar y fortalecer su negocio en el mercado internacional, lo que permite soportar los vaivenes macroeconómicos y de política monetaria que puedan surgir en un territorio concreto. Eso sí, todavía queda camino por recorrer para que las grandes operaciones de fusión transfronterizas puedan llegar a ser una realidad como aspira el Banco Central Europeo (BCE) con la armonización de las normativas a nivel comunitario y la finalización de la Unión Bancaria que todavía está pendiente y tanto ansían los diferentes actores del sector.
Los seguros
En el sector asegurador, las compañías españolas diversificadas en el exterior han resistido, por lo general, mejor el 2023. Algunas como Línea Directa, que no cuenta con negocio internacional, mostraron pérdidas valoradas en 4,4 millones de euros debido, también, a la gran concentración de los ingresos en autos.
Este ramo ha sido el lastre para las aseguradoras españolas, ya que el negocio cerró el ejercicio pasado con una media de ratio combinado (índice que calcula los gastos de la compañía en reclamos y gastos respecto al monto de las primas que cobra) en el 101%: es decir, que por cada 100 euros que ingresa la compañía por prima, tiene que aportar 101 euros de gastos.
Sin embargo, otras aseguradoras como Mapfre no hubieran logrado un resultado como el de cierre de 2023 sin el negocio en Latinoamérica. La compañía dirigida por Antonio Huertas alcanzó unos ingresos en Latam de 9.800 millones de euros y un resultado neto de 373 millones, siendo Brasil la región más importante para el grupo, ya que representa algo más del 50% de los ingresos totales de este continente. En total, esta región ya supera en ingresos a Iberia (España y Portugal) por valor de 1.000 millones de euros, y constituye, sobre el total de ingresos, el 43%, estando en constante crecimiento (+9,3%).
Otra de las compañías que han avanzado en materia de internacionalización es Mutua Madrileña. Y es que el negocio fuera de las fronteras españolas de Mutua creció un 80,9% entre el 2022 y el 2023, aportando a los beneficios de la aseguradora (431 millones de euros en 2023) un total de 24,2 millones.
Grupo Mutua cuenta con presencia en Chile desde el año 2026, cuando adquirió el 40% del grupo asegurador Bci Seguros a Empresas Juan Yarur. En 2020 amplió su participación hasta el 60%. Este negocio aportó un total de 928 millones de ingresos, un 9,4% más que el año anterior.