Banca y finanzas

Los seguros contra el riesgo de salir a bolsa vuelven al mercado

Bolsa de Madrid. Alberto Martín

Aitor Caballero Cortés

El parqué español ha estado en estos casi dos años falto de compañías que quisieran salir al mercado a buscar financiación fuera. Pero tras 20 meses de espera, la perfumista Puig fue el viernes la primera en realizar una Oferta Pública de Venta (OPV). Y llegó a lo grande, ya que de momento ha sido la mayor salida a bolsa de toda Europa y la mayor colocación en el mercado español desde que Aena salió a bolsa en 2015.

Así, parece que el optimismo vuelve a los mercados, aunque en este primer trimestre el volumen mundial de OPV se redujo un 7%, según datos de EY. La prudencia aún es máxima, ya que a pesar de dicho descenso, los ingresos de esas salidas a bolsa sí que crecieron un 7%, hasta llegar a 23.700 millones de dólares (22.200 millones de euros).

Está aún por ver si el estreno de Puig provocará un efecto arrastre en más compañías, aunque hay algunas comoBergé que cancelaron su salida a bolsa de Astara en este 2024 "por las condiciones de mercado". De momento, otras candidaturas como Europastry, Hotelbeds, Volotea y Tendam parece que siguen adelante con la intención de tocar parqué, algunas en verano, otras más adelante.

Según los datos que arroja el mercado, se prevén hasta 11 salidas a bolsa importantes en este 2024. En cambio, estas operaciones entrañan cierta dificultad para las compañías, de ahí que la espera para finalmente poder cotizar sea tan larga, ya que la preparación es clave.

Los riesgos de las OPV

"Una salida a bolsa representa un cambio muy importante para la empresa, en especial en su perfil de riesgo", explica Estefanía Taboada, que trabaja en Beazley, compañía especializada en seguros de OPV en Europa, Norteamérica y Asia, como directora de suscripción de líneas financieras internacionales. El principal factor de siniestralidad de las compañías que se abren a cotizar en el mercado reside en el folleto que emiten a la hora de tocar el parqué.

"El folleto informativo para la venta o admisión de valores en mercados regulados es un documento que el emisor (es decir, la empresa), debe elaborar y publicar antes de empezar a vender los valores al público o admitirlos a negociación" expresa la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) en un apartado de su sitio web. Por tanto, al ser este folleto fundamental en las OPV, este debe ser revisado prácticamente al milímetro.

"Esta es una de las razones por las que existen pólizas para cubrir los riesgos de una salida a bolsa, pero no es la única", argumenta Taboada. La directiva de Beazley manifiesta que este seguro "permite aislar en cierto modo las responsabilidades que puedan surgir de la transacción". Además, comenta que este producto es un complemento con mucha sinergia a otro tipo de seguros, como el de D&O (directores y administradores, por sus siglas en inglés).

Este tipo de coberturas para salidas a bolsa lleva varios años con números muy bajos en cuanto a nuevas contrataciones, debido al escaso movimiento en los parqués de todo el mundo, pero eso no significa que estas coberturas no estén presentes en las empresas. Según Taboada, la póliza ofrece coberturas de hasta seis años, a diferencia que la de D&O, que se renueva de forma anual. Además, este seguro se puede contratar en otros contextos, como el de emisión de deuda:"En el momento en el que haya un folleto informativo, esta póliza está disponible para asegurar las responsabilidades del mismo", declara Taboada.

Las inexactitudes en el folleto, que puede contener información financiera o los riesgos a los que se enfrenta el negocio, son claves para los inversores, ya que sus decisiones dependen de ello. Son ellos la principal fuente de reclamaciones de un seguro que también atiende a las propias personas aseguradas, la compañía, los accionistas mayoritarios, los accionistas vendedores, las emisiones de valores subsiguientes y las Investigaciones reglamentarias e internas.

"Cualquier declaración inexacta incorrecta o errónea alegada, o la no declaración de un hecho material o incumplimiento de la oferta, puede derivar para los firmantes del folleto en gastos de defensa importantes o en indemnizaciones por daños y perjuicios", dice Oswald Carvalho, director ejecutivo de riesgos en Marsh España.

Protección variada

En cuanto a los límites de cobertura que puede llegar a aportar este producto, depende directamente de "lo mucho o poco que quieras asegurar", afirma Taboada. En el caso de Beazley, el límite de suma asegurada es de 25 millones de euros. No obstante, en el caso de Marsh, Carvalho confiesa que en las últimas operaciones en las que han participado, la cifra de protección asegurada se ha elevado entre 50 y 150 millones de euros.

Respecto al coste de esta protección para las empresas que salen a bolsa, también varía en función de varios factores que explica Carvalho: "influye el sector de la actividad, su situación financiera, su tipología, el importe de la operación y el valor de la sociedad. También depende si la exposición a inversores americanos mediante una listing directa en Estados Unidos".

Por último, cabe destacar que estos seguros apenas presentan siniestralidad, pero cuando la hay, esta es bastante severa. Coinciden en ello tanto Taboada como Carvalho, de ahí que ambos afirmen que las salidas a bolsa estén casi siempre aseguradas.