La borrasca Nelson dispara la asistencia en el hogar un 23% en Semana Santa
- El temporal ha provocado que los daños extensivos se disparen un 260%
Aitor Caballero Cortés
La borrasca Nelson trajo una Semana Santa pasada por agua, donde miles de procesiones se quedaron sin salir. A cambio, el campo agradeció más que nunca las precipitaciones, evitando (o atrasando) el abastecimiento de agua a determinados territorios como Cataluña o Andalucía para los cultivos, pero también para el uso habitual en los hogares.
Sin embargo, las abundantes precipitaciones por toda la Península se tradujeron en un aumento del 23% en los siniestros en los hogares, según recoge el Observatorio de Siniestros de Asitur. Este periodo festivo ha provocado que los daños extensivos, aquellos que se consideran como menos frecuentes pero que suponen una pérdida importante de beneficios para las aseguradoras, se dispararon un 260% respecto a la Semana Santa del año pasado, que fue, por lo general, bastante seca.
En cuanto a las tipologías de daños en el hogar, el estudio refleja que los daños eléctricos fueron los más frecuentes, aumentando un 41,4% respecto al mismo periodo del año anterior, así como los daños por agua, que también crecieron un 18,8%.
Por otro lado, las lluvias, las asistencias en carretera se mantuvieron bastante estables respecto a la festividad de 2023, a pesar de la lluvia. Con el asfalto mojado, la probabilidad de accidente aumenta: según fundación CEA, la media diaria de siniestros con lluvia crece un 7,4%.
De hecho, aunque las asistencias en las vías españolas descendieron un 0,38%, las precipitaciones y el aumento en los desplazamientos de Semana Santa un 1% provocaron el aumento de las asistencias derivadas de accidente un 24,3%. De estas, más de la mitad fueron accidentes con lesiones a asegurados y terceros.
Desglosadas las asistencias en carretera por su naturaleza, el observatorio muestra como las averías descienden un 2,18%, además de otros sucesos como pinchazos e incidentes con neumáticos bajan un 1,8%. Por contra, las averías causadas por problemas eléctricos crecen un 31,7%, y las de trasmisión un 23,2%.