Banca y finanzas
Las otras cifras de la banca: gana hasta un 70% menos en España que en 2007 y el impuesto se come hasta el 30%
- Las entidades ampliaron su negocio internacional pero rebajan el doméstico
- La banca pulveriza récord: gana un 27% más y roza el 15% de rentabilidad por los tipos
Lucía Gómez
Los beneficios récord de la gran banca que se presentaron en las últimas semanas enmascaran otra realidad: pese a que a nivel de grupo las cifras de ganancias suponen máximos históricos para casi todos ellos, al desagregar las conseguidas en España se puede ver que la realidad es otra. Los bancos ganaron hasta un 70% menos en España en 2023 que los beneficios conseguidos por la suma de las entidades que ahora los forman en el año 2007, justo antes del estallido del boom inmobiliario y en un momento en que la banca iba viento en popa. Estas cifras se verían incrementadas de no ser por el impuesto sobre los denominados beneficios extraordinarios que se come hasta un 30% del beneficio que generan en nuestro país.
Así, la suma de casi 26.000 millones de euros de ganancias del conjunto de las grandes entidades del sector en el último ejercicio tiene varios matices que pasan también por los índices de rentabilidad y eficiencia –las cuantías que se necesitan para conseguir 100 euros de ingresos– de los diferentes grupos en nuestro país en los que las entidades ahora ponen el foco para mejorar a futuro sus resultados y que se colocaron por primera vez hace apenas un año.
Las diferencias, banco a banco
La entidad que más ha visto reducido su beneficio en España con respecto a 2007 es Unicaja, resultado de la suma de ocho antiguas cajas entre las que se encontraban la antigua Caja de Asturias –más tarde Liberbank– o Caja Castilla La Mancha. La suma del beneficio de estas ocho cajas en 2007 daba como resultado 1.174 millones de euros, cifra que contrasta con los 264 millones que totalizó su heredera en 2023. Con esta última cifra como referencia, el impuesto que grava el 4,8% de los intereses y comisiones generados en España supondrá el pago de entre 75 y 80 millones de euros durante este ejercicio, lo que supone hasta casi un tercio del total.
Por su parte, Santander consiguió en España un beneficio de 2.371 millones en 2023, un 41% menos que la suma de las ganancias de Santander, Popular, Banesto y Pastor –ahora todos ellos integrados en el grupo de origen cántabro– en el año 2007. Esos 2.371 millones de beneficio llevan aparejado el pago de 338,5 millones como consecuencia del impuesto extraordinario al sector al que deberá hacer frente el próximo mes y tras pagarlo ya el año pasado.
Por su parte, BBVA que desde entonces ha digerido seis cajas –Catalunya, Manlleu, Manresa, Sabadell, Tarragona y Terrasa– consiguió en 2023 unos beneficios en España de 2.755 millones, un 11%menos que los 3.116 millones que cosecharon de forma conjunta hace dieciséis años. En el caso de Sabadell, que se hizo con la CAM, Banco Gallego y Caja Guipuzcoana desde el estallido de la crisis inmobiliaria, la diferencia entre el beneficio de 2007 y el del 2023 es de un 12% negativo.
Mejora de la eficiencia
Estos resultados de beneficio llevan aparejados una mejora de la eficiencia. Así, por primera vez, las seis entidades del Ibex 35 consiguieron colocar su ratio de eficiencia –relación existente entre los ingresos que obtiene una entidad y los gastos en que incurre para obtener dichos ingresos, por lo que cuanto más baja sea, mejor– por debajo del 50%. Esta cifra es la que se considera saludable por parte de los analistas e inversores, ya que supone que los bancos se gastan 50 euros o menos para obtener unos ingresos brutos de 100. A ello han contribuido, entre otras cosas, los planes de eficiencia, entendidos como cierre de oficinas y reducción de plantillas, que se han desarrollado en los últimos años en las entidades de todo el país, además de el cada vez más importante negocio de banca online y la digitalización, que reduce los costes.