Aragón

BonÀrea Agrupa invertirá 400 millones en su centro alimentario-logístico en Zaragoza


    Eva Sereno

    La empresa instalará en la localidad zaragozana de Épila su segundo centro alimentario-logístico, que contará con una superficie de cerca de 180 hectáreas. El proyecto se desarrollará en varias fases, estando previsto que las obras puedan comenzar a finales de 2018 o principios de 2019 con el almacén logístico. En total, se prevé la generación de 4.000 puestos de trabajo directos con las instalaciones totalmente terminadas y a pleno rendimiento.

    El desarrollo del proyecto se contempla en un horizonte de diez años y comprende varias fases de ejecución. La primera de ellas comenzará, tras terminar todos los trámites administrativos previsiblemente a finales de 2018, con la urbanización de la parcela de alrededor de 180 metros cuadrados y la construcción del almacén logístico, que podría estar ya operativo en 2021.

    En una segunda fase, se contempla la construcción de las naves industriales para matadero de aves, porcino, vacuno y ovino, además de las plantas de elaborados para cárnicos, secaderos de jamones, línea de pan, fábrica de petfood y la puesta en funcionamiento de los servicios generales como la depuradora, cogeneración, oficinas, talleres, gasolinera y la venta para el canal Horeca. En 2029 estaría ya terminado y operativo todo este centro productivo-logístico.

    El nuevo complejo agroalimentario, que se comenzó a gestar en el año 2008 aunque se paralizó momentáneamente por la crisis, supondrá una inversión total de 400 millones de euros y generará 4.000 puestos de trabajo directos una vez estén las instalaciones terminadas y en pleno rendimiento. En la fase inicial, se estima que los puestos de trabajo creados serán 1.000. Además, también se generará empleo indirecto.

    Estas instalaciones serán el segundo centro de producción y logística de BonÀrea Agrupa y su diseño reproduce el centro de La Closa, que la compañía tiene ya instalado en Guissona (Lérida).

    Este nuevo complejo agroalimentario se ubicará en la localidad zaragozana de Épila. Concretamente, junto a la autovía de Madrid y enfrente del Polígono El Sabinar. Este emplazamiento ha sido elegido por la compañía por su posición geoestratégica, puesto que la empresa podría llegar a suministrar sus productos a 500 tiendas en un tiempo de tres horas.

    Desde el nuevo centro de Épila, el objetivo es poder atender la demanda de las tiendas actuales y futuras en la zona norte de España, así como Madrid y centro y Valencia, respondiendo a su vez a las necesidades de la empresa dentro de su plan de expansión. La capacidad de abastecimiento será superior a los 1.000 puntos de venta.

    Para poner en marcha este proyecto, el presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán, y el presidente de BonÀrea, Jaume Alsina, han firmado el convenio de colaboración, tras el su aprobación en Consejo de Gobierno, reunido hoy en sesión extraordinaria.

    El Gobierno de Aragón apoyará el proyecto a través de su declaración de interés autonómico para agilizar los trámites administrativos de la iniciativa empresarial, así como con el impulso de un Plan de Interés General de Aragón para facilitar su ejecución.

    Además, se contará con el Instituto Aragonés de Empleo (INAEM) para la selección de los empleados, que se prevé que pueda comenzar en breve plazo para preparar a las personas para que conozcan la forma de trabajar en el grupo, según ha apuntado Jaume Alsina.

    Por su parte, el ayuntamiento de Épila -cuyo alcalde Jesús Bazán, también ha estado presente en el acto de firma-, colaborará en la construcción de los accesos al polígono y en facilitar una parte de las hectáreas que se precisan para las instalaciones.

    Una nueva Opel España

    En el acto de la firma, el presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán, ha destacado la importancia de este proyecto para la comunidad aragonesa, sobre todo, para el sector agroalimentario, que es estratégico en Aragón.

    El impacto que puede tener el complejo agroalimentario ha sido comparado por Lambán con la planta de Opel España en Figueruelas (Zaragoza), al afirmar que será "la Opel de la industria alimentaria".

    Además, el presidente ha afirmado que la llegada de BonÀrea permitirá impulsar y estructurar el sector agroalimentario aragonés, aparte de consolidar a Aragón como un centro logístico de referencia. También tendrá un efecto multiplicador de la actividad económica y propiciará atraer población y dinamizar las zonas rurales afectadas.

    Vínculo con Aragón

    La presencia de BonÀrea en la comunidad aragonesa no es nueva. El grupo cuenta con fábricas de piensos en Bujaraloz, granjas propias en Sena y delegaciones de distribución cárnica en Huesca, así como centros de recogida de cereal en Sos del Rey Católico. Además, cuenta con 50 tiendas BonÀrea, 22 agrocentros BonÁrea y cinco gasolineras BonÀrea.

    En total, el grupo emplea a alrededor de 400 personas en la comunidad aragonesa, además de mantener una relación directa con muchos proveedores agroalimentarios aragoneses. Por ejemplo, BonÀrea Cooperativa suma 2.000 socios aragoneses que crían y engordan aves y ganado, que se vende en las tiendas BonÀrea. La producción ganadera anual en la comunidad aragonesa es de 500.000 cabezas de ganado y de 15 millones de aves.

    Por su parte, la sociedad mercantil BonÀrea Corporación tiene 284 accionistas residentes en la comunidad aragonesa, siendo la mayoría socios agricultores y ganaderos de BonÀrea Cooperativa.

    BonÀrea Agrupa tiene un centro alimentario en Guissona (Lérida) con mataderos y salas de despiece de todas las especies animales, plantas de elaborados y cocinados, además de zona logística, entre otras instalaciones, para suministrar a 500 tiendas BonÀrea de Cataluña, Aragón, Castellón, La Rioja, Navarra, Madrid, Guadalajara y Andorra. Este centro, que tiene una superficie de 225.000 metros cuadrados, emplea a 4.000 personas y hay 12.000 agricultores y ganaderos vinculados a través de la cooperativa.