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Una camarera que hace una jornada de 9 horas pide que se le cambie a jornada completa y la respuesta da que hablar: "Yo te aprecio mucho, pero..."
- El trabajador llevaba 10 meses con ese turno y contratado a "media jornada"
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elEconomista.es
El sector de la hostelería es uno de los que más dinero genera en España, según datos de la Confederación Empresarial de la Hostelería de España, un volumen de ventas de 122.862 millones de euros. Sin embargo, las condiciones de sus trabajadores no son siempre las mejores y no es raro que en las redes se viralice alguno de estos momentos tan comentados.
En esta ocasión ha sido la cuenta de Soy Camarero en X (antes Twitter), llevada por Jesús Soriano, la que ha puesto una nueva queja de una trabajadora. Se trata de una camarera que lleva ya 10 meses trabajando en un local a 9 horas diarias de martes a domingo, aunque en su contrato tenga especificado que está contratada a media jornada.
"Aunque el contrato diga otra cosa"
"Hoy quería hablar contigo después del turno, pero como tenías médico no quería retrasarte", arranca su mensaje a su encargada antes de poner en contexto de su situación. "Era por si me podrías cambiar el contrato a jornada completa y cobrar mis descansos de los lunes", apunta.
No tarda mucho en responder dejando claro que "nosotros quedamos en lo que hay lo que cobras de más es para el día de descanso", explica sorprendiendo a la trabajadora que no sabe "¿lo que cobro de más?". Sin embargo, deciden hablarlo al día siguiente en persona.
Pasan algunos días y al no ver que cambie la situación la empleada vuelve a insistir "con todo el respeto". "Estoy contratada a media jornada, realmente llevo trabajando 9 horas al día, de martes a domingo, durante 10 meses. Eso significa que hago jornada completa y más, aunque el contrato diga otra cosa".
Sin querer hablar más del contrato pide que al menos "se me pague el lunes como día de descanso como cualquier otro día de trabajo. No es un extra, es parte de lo que me corresponde por trabajar más horas de lo que marca el contrato".
Sin conflictos en el trabajo
Sigue el mensaje dejando claro de que con esto no quiere sacudir el avispero y trata de ser lo más cauta posible: "No quiero problemas ni malos rollos, pero sí me gustaría que se valore lo que de verdad estoy trabajando y no según lo que pone en contrato".
La respuesta aún más veloz deja claro que esto ya lo habían hablado en varias ocasiones: "Yo te pago según lo acordado yo te valoro, pero no puedo darte más y menos ahora que hay menos gente", apunta pero la trabajadora insiste en que sea algo simbólico como "20 euros que me ingrese para los lunes".
No puede ser más clara: "No. Yo te aprecio mucho, pero si no quieres me lo dices".
La guinda
Dejando un poco las reivindicaciones laborales, un día percibió algo menos de lo que le correspondía cobrar. "¿De los 55 euros que me has cobrado 5 por la comida? Al menos es lo me ha dicho que los 5 que me faltan son de la comida", pregunta dejando claro que le parecía raro y solo quería aclararlo.
La respuesta no puede ser más escueta y clara: "Sí". A raíz de esta decisión de la empresa, la empleada termina por estallar: "¿En serio me estás diciendo que me has cobrado cuando nunca puedo desayunar porque soy la que sabe hacer bocadillos? De 6 días de la semana os pido de comer 2", dice dando a entender que los desayunos le corresponden por contrato. "No es por el dinero, pero me ha parecido feísimo", termina.