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El técnico que cobra 40.000 euros por trabajar dos veces al año y solo para cambiar una bombilla

Foto: Captura de vídeo (Vikor).

elEconomista.es

A una asombrosa altura de más de 450 metros, Kevin Schmidt realiza una labor inusual que desafía los límites. Como técnico de torres de comunicación en Sioux Falls Tower and Communications, Schmidt se enfrenta a la tarea abrumadora de escalar torres de transmisión, un trabajo que la mayoría evitaría. Su historia ha capturado la atención del público gracias a un video viral que muestra su destreza al reemplazar una bombilla en la cima de una gigantesca antena de televisión.

En el video, que fue filmado por un compañero de trabajo, se puede ver a Schmidt realizando su tarea con una calma y serenidad admirables, un testimonio de sus ocho años de experiencia en el campo. "No esperaba que se volviera tan popular", comentó Schmidt en una entrevista que realizó en 2015 sobre la inesperada respuesta del video.

El impresionante material grabado desde un dron ofrece una visión de la rutina de Schmidt. Sin embargo, cambiar bombillas es solo el principio de sus responsabilidades. Cada seis meses, este valiente empleado no solo reemplaza bombillas cruciales para la seguridad del tráfico aéreo, sino que también ejecuta tareas de mantenimiento y, cuando es necesario, instala nuevas torres. Estas bombillas de gran altitud son vitales para alertar a los aviones sobre la presencia de las torres, desempeñando un papel clave en la prevención de accidentes aéreos.

A una asombrosa altura de más de 450 metros, Kevin Schmidt realiza una labor inusual que desafía los límites. Como técnico de torres de comunicación en Sioux Falls Tower and Communications, Schmidt se enfrenta a la tarea abrumadora de escalar torres de transmisión, un trabajo que la mayoría evitaría. Su historia ha capturado la atención del público gracias a un video viral que muestra su destreza al reemplazar una bombilla en la cima de una gigantesca antena de televisión.

En el video, que fue filmado por un compañero de trabajo, se puede ver a Schmidt realizando su tarea con una calma y serenidad admirables, un testimonio de sus ocho años de experiencia en el campo. "No esperaba que se volviera tan popular", comentó Schmidt en una entrevista que realizó en 2015 sobre la inesperada respuesta del video.

El impresionante material grabado desde un dron ofrece una visión de la rutina de Schmidt. Sin embargo, cambiar bombillas es solo el principio de sus responsabilidades. Cada seis meses, este valiente empleado no solo reemplaza bombillas cruciales para la seguridad del tráfico aéreo, sino que también ejecuta tareas de mantenimiento y, cuando es necesario, instala nuevas torres. Estas bombillas de gran altitud son vitales para alertar a los aviones sobre la presencia de las torres, desempeñando un papel clave en la prevención de accidentes aéreos.

Uno de los días de trabajo

En un día de estos, Schmidt puede atender hasta ocho torres, desafiando a la gravedad y a su propio temor. A pesar de las innegables dificultades, a menudo se toma el tiempo para capturar selfies en lo alto de estas imponentes estructuras, demostrando su confianza y comodidad en estas alturas vertiginosas.

Aunque recibe una considerable compensación de 20.000 euros por cada escalada, algunos comentaristas en las redes sociales han planteado que, dado el nivel de riesgo y esfuerzo involucrado en su trabajo, Schmidt parece estar "mal remunerado".

Basándome en este vídeo, diría que está muy mal pagado", comentó un usuario. Otros, en un tono más humorístico, se preguntaron sobre los retos que implica su labor, como el temor de que la bombilla se le caiga en el momento menos oportuno.