El 1 de enero entró en vigor una nueva normativa sobre alimentos en la UE que autoriza y facilita la comercialización de insectos para el consumo humano, entre otra serie de productos denominados 'Novel Food' (nuevos alimentos). Una nueva oportunidad de negocio que ha aprovechado el emprendedor Sergio Pérez Berasategui creando la compañía Don Grillo para vender gusanos, escorpiones, saltamontes o grillos: "A mí el sabor de los escorpiones me recuerda a los crustáceos", explica.
Profesional del sector de la comunicación y el grafismo, Sergio comenzó a trabajar en este proyecto el pasado año porque vio en la nueva normativa de la Comisión Europea una oportunidad para ser la primera empresa española en vender insectos para el consumo humano. Residente en una población cercana a Francia, país que comercializa este tipo de alimento desde unos cinco años, el fundador de Don Grillo entiende que los insectos tienen muchas posibilidades en el sector de la alimentación: "Viendo las experiencias en otros países como EEUU, las posibilidades son inmensas (…) solo hay que superar una barrera visual y cultura". Después de todo, los caracoles, mollejas o sesos son manjares de la cocina española más tradicional.
El catálogo de insectos de Don Grillo, que son de origen francés, va desde los grillos con diferentes especias a escorpiones o gusanos cocinados en diferentes estilos. Sergio Pérez Berasategui explica que aunque los sabores y gustos son muy subjetivos, el sabor de los bichos recuerda a las palomitas de maíz o a cualquier snack salado. En el caso de los escorpiones dorados de Manchuria, uno de los productos más insólitos del catálogo, el sabor "recuerda a los crustáceos". El precio por tres de estos escorpiones, de 6 cm de largo, es de 9,90 euros. Por el momento, Don Grillo solo tiene servicio de venta online aunque en un futuro no descarta la distribución a comercios o incluso la producción.
Además de insectos, esta joven compañía también presenta una serie de productos derivados como galletas, snacks salados o barritas energéticas. Lo cierto, el sector de la alimentación saludable y deportiva casa con las propiedades alimenticias de los insectos y sus productos derivados. Berasategui explica que estas especies tienen un alto contenido en proteínas, son bajas en grasas.
En este sentido otra joven compañía española, Insectfit, surgida del programa lanzadera impulsada por el presidente de Mercadona, Juan Roig, vende barritas energéticas para deportistas elaboradas con harina de insectos, principalmente grillos, "que son ricos en una proteína muy completa", según la empresa. "Queremos comenzar con los usuarios de los gimnasios e ir abriendo el campo hasta llegar al consumidor final por completo para que los insectos se conviertan en el nuevo sushi, que hace 15 años nadie habría probado", explicó Gabriel Vicedo, CEO de la empresa, durante la presentación celebrada el pasado verano.
