Mientras, a estas alturas, la anécdota se ha convertido en la comidilla de los alumnos del curso de tercero de la ESO que fueron testigos de lo publicado, los padres de Froilán no se ponen de acuerdo ni siquiera a la hora de afrontar la última polémica de su hijo, cuando supuestamente hizo un comentario racista contra un chico oriental tras intentar colarse en una montaña rusa del Parque de Atracciones.
El silencio de la infanta Elena contrasta con la reacción de su ex marido: mientras que la hija mayor de don Juan Carlos ha optado hasta el momento por no arrojar más leña al fuego, Jaime de Marichalar ha salido en defensa de su primogénito, aunque ha tardado más de una semana en hacerlo.
Siete días han pasado desde que trascendiera el altercado de Froilán en el parque de Atracciones de Madrid, en el que, según varios testigos, el joven llamó "puto chino" a otro chico de aspecto oriental. El ex duque de Lugo ha reconocido a Vanitatis que, efectivamente, su hijo estuvo ese día allí, y que vivió un encontronazo con un grupo de estudiantes, como se había publicado. No obstante, en la versión de Marichalar no existió la famosa frase que le atribuyen a Froilán -"Tú cállate, puto chino"- y que ha dado la vuelta al mundo.
Al contrario, y como cabría esperar, el ex marido de la infanta sostiene que su primogénito fue víctima y no culpable: "Le quisieron provocar, pero mi hijo pasó del tema", asegura el padre de Froilán. Sin embargo Jaime de Marichalar no estuvo allí, y el ex de la infanta Elena se limita a repetir lo que le contó su propio hijo después de que saltara la polémica, una versión que apoyarían los propios amigos y acompañantes de Froilán. Fuentes de prensa del Parque de Atracciones citadas por el Huffington Post han confirmado que los hechos sucedieron "tal y como aparece en los medios", y que "si no ha trascendido mucho más es porque se quedó en eso. No hubo que llamar a seguridad ni nada", añaden.
Recordemos que, según aseguraron a este portal varios testigos presenciales, Froilán habría intentado colarse el pasado miércoles 27 de mayo, pasadas las 6 de la tarde, en una montaña rusa del parque de atracciones de Madrid. Ante las intenciones del joven, un estudiante de aspecto oriental le llamó la atención, por lo que el hijo de la infanta Elena se encaró con él y le dijo: "Tú cállate, puto chino", escena que fue presenciada por varias personas, entre las que se encuentra un grupo de niños y uno de los tutores que acompañaba a los estudiantes.
A pesar de las explicaciones dadas por Jaime de Marichalar, los testigos presenciales de la discusión sostienen la primera versión: en el curso de tercero de la ESO del colegio madrileño de la Consolación es vox populi la ya famosa discusión entre Froilán con uno de sus compañeros, de origen asiático. Aun respetando la versión dada por Jaime de Marichalar, el padre de uno de los alumnos del colegio de la Consolación que presenció los hechos, cree que "resulta poco verosímil imaginar que un grupo de niños, más pequeños que Froilán, empezaran sin motivo a insultar al sobrino del Rey, acompañado de otros amigos, además de su escolta". Los niños de ese curso de la Consolación aseguran además que su tutor fue testigo de la desagradable anécdota y que gracias a la actitud del docente todo quedó ahí y no pasó a mayores la discusión con el muchacho de origen asiático.
La supuesta reacción de Froilán ha sido muy criticada dentro y fuera de España. Multitud de medios españoles y extranjeros han recogido la noticia adelantada por Evasión De América al Reino Unido, la frase que se le atribuye a Froilán se ha extendido, llegando a China, país en el que periódicos y televisiones también se han hecho eco de lo publicado. En China, lógicamente, las reacciones han sido airadas, después de que la televisión difundiera el incidente protagonizado por el sobrino del rey Felipe VI, cuarto en la línea de sucesión al trono español.
Se da la circunstancia de que Jaime de Marichalar es consejero de Loewe, la firma de lujo que pertenece a LVMH, holding en donde se incluye también la preciada marca Louis Vuitton, entre otras. Y los habitantes de China están detrás de una parte muy significativa de las ventas de estos maravillosos complementos, y artículos de lujo, auténtico objeto de deseo. De hecho, una parte muy importante del negocio europeo de la marca, y de España en concreto, se debe a la devoción que los turistas chinos adinerados profesan por estos exclusivos diseños.
Sin duda, en la empresa de cuyo consejo forma parte Jaime de Marichalar los clientes chinos son tan apreciados como los que más, y nada agradaría menos a los responsables de esta importante compañía que un asunto racista tan desagradable como el que implica al hijo de su consejero pudiera dañar su imagen entre los ricos chinos que adoran sus productos.
La fama de Froilán no ayuda al Borbón en esta ocasión: desde la chiquillada de la patada a su prima en la boda de Felipe y Letizia, hasta su amistad con el pequeño Nicolás, la turbia historia del Rólex Falso, su polémica labor como relaciones públicas de discotecas para adolescentes, su tristemente famoso autodisparo en un pie con una escopeta, que obligó a su padre a declarar ante la Guardia Civil, o su mediocre expediente académico le han forjado la imagen pública que tiene
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