
Seguro que estamos cansados de escuchar que el desayuno es la comida más importante del día. Esta afirmación es cierta, ya que es necesario que carguemos las pilas desde primera hora de la mañana y rompamos el ayuno que nuestro cuerpo sufre a lo largo de la noche.
Para conseguirlo es importante que ingiramos alimento desde primera hora, ya que además conseguiremos activar el metabolismo lo antes posible. Pero esto no quiere decir que tengamos licencia para llevarnos cualquier tipo de alimento a la boca, sino que es importante que cuidemos lo que comemos a la hora de desayunar.
De lo que solemos pecar a la hora de desayunar es de ingerir grandes cantidades de bollería industrial y muy pocos alimentos que de verdad nos nutren. Debemos tener presente que este tipo de bollería lo que hace es aportarnos infinidad de calorías vacías. Es cierto que por la mañana el aporte de energía es necesario, pero para ello hay que elegir alimentos cargados de energía y nutrientes saludables.
Si nos detenemos a analizar la bollería industrial veremos que es un tipo de alimento que contiene infinidad de grasas trans que lo único que hacen es empeorar nuestra salud y poner en peligro nuestro sistema circulatorio, pues el organismo no las aprovechará.
Como sustituto podemos optar por postres caseros como el bizcocho, que tendrá muchas menos calorías y grasas, y nos aportará infinidad de nutrientes además del sabor dulce que buscamos.
Otra de las soluciones a las que solemos recurrir son los cereales azucarados, que no son una buena alternativa para cuidarnos, pues contienen altas dosis de azúcares refinados que lo único que harán será subir nuestros niveles de glucosa de manera momentánea. No necesitamos que estén azucarados, ya que esto nos aporta más hidratos refinados que si no utilizamos el cuerpo almacena en forma de grasa. Por ello como opción consumiremos cereales integrales sin azúcares añadidos. Este alimento contiene hidratos de carbono complejos, que el cuerpo tarda más en digerir, manteniendo las reservas de energía por más tiempo, para así poder quemarlas y no acumularlas en forma de grasa.
La fruta es una buena idea para cargar las pilas de energía a la vez que consumimos vitaminas y fibra. Comer la fruta entera es la mejor opción, aunque también podemos decantarnos por zumos recién hechos o fruta licuada, que no conservará todas las propiedades, pero sí nos aportará fibra y energía, pues es un alimento que contiene altas dosis de fructosa. Otra manera de consumir todo tipo de fruta es añadiendo trozos de fruta deshidratada en la leche, de modo que podamos consumir frutas de otras temporadas.
Las tostadas son otro alimento típico del desayuno. Nosotros vamos a recomendar que se realicen con pan integral, que nos aportará hidratos de carbono de mejor calidad, pues se liberarán de manera lenta, evitando así que se acumulen en forma de grasa por no haber sido quemadas mediante la actividad física. Como sustituto de la mantequilla en las tostadas proponemos el queso fresco, que aportará sabor y evitará las grasas saturadas de la mantequilla que no son nada beneficiosas.
Utilizar canela o miel como endulzante en vez del azúcar es una buena manera de librarnos de algunas calorías innecesarias y aportar sabor de forma sana al desayuno. Si elegimos el azúcar, es importante que también sea integral, aunque podemos optar por melazas u otros derivados más saludables.
Un sencillo gesto a la hora de elegir los ingredientes que conformarán el desayuno es lo que determinará lo saludable de esta comida. Es importante si queremos mantener nuestra salud en perfectas condiciones que reparemos en estos puntos para así poder disfrutar de alimentos saludables y llenos de nutrientes beneficiosos para el organismo.