Transportes

Los transportistas discrepan sobre la prórroga del límite para que los autónomos tributen por módulos

    <i>Foto: Archivo</i>

    EFE

    Las asociaciones de transportistas han acogido hoy con división de opiniones la decisión del Gobierno de prorrogar de nuevo el límite de facturación para que los autónomos puedan tributar por el sistema de módulos.

    La Asociación de Transporte Internacional por Carretera (Astic), que agrupa a las mayores empresas del sector, considera que esta medida perpetúa la inseguridad jurídica, mientras que la Federación Española de Transporte de Discrecional de Mercancías (Fetransa) ha recibido con "satisfacción" la prórroga.

    Según Astic, el real decreto-ley aprobado hoy por el Consejo de Ministros prorroga "in extremis" por un año más el límite de facturación, fijado en 125.000 euros, e "inhabilita" la orden publicada el pasado 30 de noviembre, que rebajaba la cuantía máxima hasta 75.000 euros.

    A juicio de Astic, "regates normativos" como éste perpetúan la inseguridad jurídica, "haciendo inútil cualquier intento de planificación empresarial mínimamente sólido".

    El director general de Astic, Ramón Valdivia, ha recordado que la reducción del límite de facturación para quienes operan en módulos "debería haber entrado en vigor en 2016, según marcaba la ley aprobada por el Congreso", pero, al igual que ahora, "se incluyó una modificación de última hora" durante la tramitación en el Senado de los Presupuestos Generales del Estado.

    Esta modificación establecía un periodo transitorio de dos años en el que se mantenía el umbral de ingresos en 125.000 euros.

    "Estos cambios de criterio a última hora preocupan a las empresas por la falta de seriedad y certidumbre que les transmite el Gobierno", ha indicado.

    Por el contrario, Fetransa ha señalado que la decisión del Gobierno supone "una moderada alegría", ya que esta asociación pretendía una prórroga de dos años.

    Según Fetransa, esta medida da "un respiro" a un gran número de autónomos que "se vieron a parar su actividad durante los últimos meses del año ante la incertidumbre que suponía el riesgo de superar la facturación de 75.000 euros anuales"