Transportes y Turismo

Los pilotos tachan la guerra Aena-Ryanair de batalla de egos y exigen diálogo

  • Sepla pide a ambas partes que se sienten a negociar para evitar un conflicto social
  • Alerta de que la disputa deja de lado el impacto en empleados y pasajeros
Directivos de Ryanair y SEPLA. / Foto: Sepla

Víctor de Elena

La disputa entre Ryanair y Aena por las tasas aeroportuarias ha dado un nuevo giro con la irrupción de los pilotos. El sindicato Sepla, mayoritario entre los tripulantes de la aerolínea irlandesa en España, ha calificado el enfrentamiento de "batalla de egos" y reclama a ambas partes que negocien de forma serena para evitar un conflicto social que amenaza con tener repercusiones tanto para los trabajadores como para los pasajeros.

En un comunicado, la sección sindical de Sepla en Ryanair manifestó su desacuerdo con la situación generada por el pulso entre la aerolínea y el gestor aeroportuario. "Estamos asistiendo a lo que interpretamos como una batalla de egos entre Aena y Ryanair. El cruce de acusaciones que mantienen desde hace meses ha llegado al extremo de lo que puede considerarse razonable", señaló Francisco Gómez, delegado jefe del sindicato en la compañía.

El dirigente sindical recordó que "no se trata de ver quién de los dos es más fuerte en este enfrentamiento", sino de que las decisiones de ambas partes "afectan a la vida de muchos trabajadores, y también a muchos usuarios". Gómez pidió un esfuerzo adicional de negociación para alcanzar un acuerdo que no perjudique ni al personal de Ryanair ni a los pasajeros que se ven afectados por los recortes anunciados.

El caso de Santiago

La aerolínea ha puesto como ejemplo la situación de Santiago de Compostela. Según Ryanair, operar en ese aeropuerto supone un coste de 11,38 euros por pasajero, mientras que el coste promedio por pasajero del grupo se sitúa en 8,36 euros, lo que supone un 36% más. La compañía argumenta que la demanda hacia ese destino no justifica el sobrecoste, ya que sus tarifas, mantenidas artificialmente bajas para estimular la ocupación, no permiten trasladar ese incremento de costes a los billetes.

Ante la perspectiva de asumir la nueva tasa que pretende implantar Aena, Ryanair advierte de que la operación en Santiago pierde aún más competitividad. Desde la aerolínea se plantea la necesidad de un modelo de tasas más flexible y adaptable a las diferentes realidades de los aeropuertos españoles, con el objetivo de evitar cierres de bases que afectan directamente a trabajadores y comunidades locales.

Impacto laboral y social

El anuncio del cierre de la base en Santiago de Compostela tendrá consecuencias inmediatas para los empleados. Una treintena de pilotos serán reubicados en otros destinos, lo que para ellos y sus familias implica un cambio de vida forzoso, con afectación directa en la conciliación y la estabilidad personal. "Pero de esto no se está hablando estos días, en las muchas noticias que se están publicando y que están llevando a la polarización del conflicto", lamentó Gómez.

Sepla advierte de que la discusión sobre tasas no puede ignorar el impacto laboral de las decisiones que se tomen. El sindicato subraya que la pugna entre Ryanair y Aena deja en segundo plano la situación de los trabajadores, que se convierten en víctimas colaterales de un enfrentamiento empresarial y regulatorio.

Desde la organización sindical se insiste en que "la cordura y la negociación" son la única vía para resolver un problema que, según recalcan, no beneficia a nadie. "Nadie sale ganando y hay mucho que perder para muchas personas", concluyó Gómez.