Transportes y Turismo

Hitachi Rail pone el foco en España ante la necesaria renovación de la red

  • La compañía japonesa, basada en Italia, refuerza su presencia en España con un
  • Aumento su plantilla tras la compra de Thales GTS
  • Su experiencia en señalización será el incentivo para optar a modernizar más infraestructuras
Tren Frecciarossa ETR 1000 desarrollado por Hitachi Rail para Iryo, estacionado en Madrid-Puerta de Atocha. V.E.

Víctor de Elena

El fabricante ferroviario Hitachi Rail mira a España tras cerrar con éxito la integración de Ground Transportation Systems (GTS), la antigua división de movilidad de la tecnológica francesa Thales, adquirida el pasado año a cambio de 1.660 millones de euros. La compañía japonesa, con amplia presencia en el continente europeo, ha consolidado en los últimos años su presencia en España, transformándose en un actor clave en su sector ferroviario.

Con una oferta tecnológica robusta y una estrategia orientada a la expansión, la compañía japonesa ha incrementado su plantilla en España al absorber a los 750 procedentes de Thales GTS, superando los 1.000 empleados en 2023. Este crecimiento se enmarca dentro de un contexto de renovación de la infraestructura ferroviaria, que se está acelerando con el objetivo de modernizar una red que ha registrado un aumento de demanda en la última década.

Desde su aterrizaje en las vías españolas en 2022 de la mano de Iryo, cuyo tren Frecciarossa fue fabricado en sus instalaciones en Italia, Hitachi Rail ha centrado su esfuerzo en ofrecer soluciones tecnológicas avanzadas en diversos ámbitos del ferrocarril, desde la fabricación de vehículos hasta los sistemas de señalización y telecomunicaciones.

Estos sistemas, que han tenido una relevancia considerable en proyectos como la puesta en servicio de la Línea de Alta Velocidad (LAV) Madrid-Sevilla hace 25 años, siguen siendo uno de los pilares sobre los que se sustenta su crecimiento. Hitachi Rail, que absorbió el negocio de la italiana Ansaldobreda, ha ganado licitaciones clave para la construcción de líneas de alta velocidad, como las que conectan Madrid con Lérida y Barcelona, y continúa invirtiendo en nuevas tecnologías para seguir siendo competitiva en un mercado cada vez más dinámico.

Un mercado al alza

El mercado global del transporte ferroviario, según indican fuentes de la empresa, presenta una tendencia positiva marcada por un fuerte impulso hacia la descarbonización. Se espera que la demanda de transporte ferroviario aumente en los próximos años, tanto en el ámbito de pasajeros como en el de mercancías.

El objetivo de la Unión Europea de trasladar el 10% del transporte de mercancías al ferrocarril para 2030 podría parecer ambicioso, pero, de acuerdo con Hitachi Rail, es posible lograr un crecimiento sostenido del 3% anual en el mercado ferroviario. Este incremento podría situar a las empresas del sector en una posición favorable para aprovechar las oportunidades que se generen en la modernización y ampliación de la red ferroviaria española.

En términos financieros, Hitachi Rail cerró el año 2023 con una facturación de 7.300 millones de euros, de los cuales el 44% provino de la fabricación de vehículos y el mantenimiento de los mismos, mientras que el 56% restante se generó por sus actividades en sistemas de control, telecomunicaciones y señalización.

Estos porcentajes reflejan la diversificación de su negocio, que no solo se limita a la fabricación de trenes, sino que abarca también la implementación y mantenimiento de tecnologías que permiten mejorar la seguridad y la eficiencia de las infraestructuras ferroviarias. En España, su facturación ascendió a 840 millones y cuenta con 6 sedes repartidas por el país y otros 40 centros de trabajo por el territorio.

El crecimiento de Hitachi Rail en España responde, en parte, a una tendencia generalizada en la industria ferroviaria: el auge de los proyectos de renovación y modernización de infraestructuras. La inversión en la red convencional, especialmente en Cercanías, es un área clave que, según las estimaciones de la compañía, necesitará una atención urgente en los próximos años. Los proyectos de modernización en curso, como la implementación del sistema ERTMS en la LAV Madrid-Sevilla, continuarán a lo largo de este año y más allá, lo que representa una oportunidad significativa para las empresas que operan en este segmento.

El mercado ferroviario global acumuló un valor de mercado superior a los 202.000 millones de euros en el período 2021-2023, una cifra que está previsto que ascienda un 3%, hasta los 240.800 millones, para el trienio 2027-2029, cuando entrarán en funcionamiento muchos de los desarrollos de alta velocidad actualmente en fase de diseño o licitación.

En consecuencia, desde Hitachi Rail esperan que este crecimiento se produzca en todos los segmentos de productos (servicios, material rodante, infraestructura, gestión de proyectos y señalización y control) y en todas las regiones donde opera -su mercado se reparte en un 35% en Asia-Pacífico, un 30% en Europa Occidental y un 18% en Norteamérica, con una presencia testimonial en otros territorios-.

En el caso de España, la compañía japonesa espera hacerse con un trozo de la gran tarta ferroviaria que tiene preparada el Gobierno hasta 2028. En total, están previstas inversiones por valor de 24.200 millones de euros, más de la mitad procedentes de los fondos Next Generation, pero también apoyados en los planes para fomentar el transporte de mercancías por tren o el impulso de la demanda de viajeros provocado por la liberalización del sector.

Interior del Frecciarossa

Para el año 2025, Hitachi Rail tiene localizadas oportunidades en alta velocidad, con 1.000 kilómetros de la red en ejecución o licitación, con tramos clave como el Burgos-Vitoria, el Talayuela-Plasencia o la finalización de la Y Vasca. Además, la renovación de parte de la red convencional para su adaptación a las autopistas ferroviarias también vislumbra un mantenimiento de las inversiones durante los próximos ejercicios.

A ello hay que sumar otros proyectos regionales, como la mejora de la red ferroviaria vasca gestionada por ETS, la instalación de ERTMS nivel 1 y OBUS en los Servicios Ferroviarios de Mallorca (SFM) o la renovación total del Metro de Bilbao, que incluye nuevo material rodante, sistema de señalización y OCC.

Oportunidades en España

En cuanto a la fabricación de material rodante, Hitachi Rail se dio a conocer en España tras firmar un acuerdo con Iryo que se tradujo en el suministro de 20 trenes del modelo Frecciarossa ETR 1000, que está previsto que aumenten en tres unidades más que se entregarán en 2026.

Estas unidades, capaces de alcanzar los 360 kilómetros por hora, han realizado ya más de 50.000 servicios y recorrido más de 23 millones de kilómetros por suelo español. Además, la compañía japonesa se encargará del mantenimiento de esos trenes durante 30 años, un contrato valorado en 700 millones de euros.

Desde la compañía reconocen que no contemplan nuevas oportunidades en el ámbito de la alta velocidad española por la exclusividad firmada con Trenitalia para desarrollar este producto. En consecuencia, la compañía visualiza una mayor oportunidad de crecimiento en los segmentos urbanos: Cercanías, metro y tranvías.

En este ámbito, Hitachi Rail ofrece una propuesta adaptada a las necesidades de las ciudades españolas. Alicante, Tarragona y Tenerife tienen previstas próximas licitaciones de tranvías, lo que abriría nuevas puertas a la expansión de la empresa en el país.

El mercado ferroviario español es altamente competitivo, con numerosos actores locales e internacionales que luchan por posicionarse en un contexto de licitaciones públicas y alianzas estratégicas. Empresas como CAF, presente en toda la cadena de suministro; Talgo, que destaca en el segmento de la alta velocidad; Alstom, con fábrica en Cataluña o Siemens, con una destacada base tecnológica en el país.

A ello hay que sumar a los gigantes asiáticos, como CRRC o Hyundai Rotem, que han intensificado su presencia en Europa, suponen una competencia considerable. Pese a ello, la compañía japonesa confía en la calidad de sus productos y en su capacidad para adaptarse a las necesidades del mercado local.

Más allá del suministro de trenes, la presencia de Hitachi Rail en España se expande a otros negocios como la señalización de vía, el control y supervisión de la red de transporte ferroviario, y servicios asociados a la digitalización del sector.

En nuestro país, la compañía japonesa ha instalado 11 centros técnicos de control y tiene desplegados 282 enclavamientos electrónicos y 1.700 circuitos de vía. Además, gestiona 221 centros de mantenimiento, controla 1.590 elementos de campo y ha implementado ERTMS en 2.098 kilómetros de la red, y otros 1.628 kilómetros con el sistema LZB, ahora en extinción progresiva.

El futuro del ferrocarril europeo

En términos de crecimiento y expansión, Hitachi Rail también está explorando oportunidades a través de adquisiciones. La compañía tiene la intención de continuar ampliando su presencia en el mercado mediante compras, particularmente en áreas relacionadas con las tecnologías digitales y los servicios asociados a la señalización, telecomunicaciones y control de tráfico. Este enfoque se alinea con las tendencias globales del sector, que se están moviendo hacia un mayor uso de soluciones digitales para la optimización de las infraestructuras y la mejora de la seguridad en la red.

El desarrollo de alianzas estratégicas también es clave para su crecimiento. Para ello, Hitachi Rail está en conversaciones con diferentes actores locales y constructoras para entrar en nuevos mercados. España, con su elevado nivel de exportaciones en el sector ferroviario, representa un punto de partida crucial para la expansión hacia otros países europeos y mercados emergentes. En este sentido, la colaboración con organismos como el FIEM o el Banco Mundial podría facilitar la financiación de proyectos de infraestructura ferroviaria en países como Egipto y Turquía, lo que abriría nuevas oportunidades de negocio.