Transportes y Turismo

Talgo perdió 107 millones en 2024 al provisionar la multa de Renfe

Fábrica de Talgo en Rivabellosa, Álava

Víctor de Elena

El fabricante de trenes español Talgo registró unas pérdidas de 107,1 millones de euros, las mayores de su historia, al provisionar en su contabilidad la multa de 116 millones de euros comunicada por Renfe como penalización por los retrasos en la entrega de los trenes Avril.

En lo relativo a la sanción, Talgo reconoce que su rentabilidad "se vio significativamente impactada" al reconocer las penalizaciones impuestas por entregar con retraso los 30 trenes Avril que componen la nueva serie 106 de la operadora estatal, de los cuales se han entregado 27 hasta el momento, quedando las tres restantes a la espera de finalizar sus pruebas. Además, el proceso de entrega de estos trenes ha generado sobrecostes adicionales al fabricante.

A ese respecto, reconocen haber registrado el importe de esta sanción en 2024 "debido a un cambio prospectivo en la estimación de la probabilidad", una vez que la empresa pública comunicó por carta la imposición de la multa el pasado mes de diciembre. Pese a ello, Talgo se ha mostrado "consistentemente en desacuerdo" con el importe de esta penalización, "justificando desde el principio los retrasos registrados como debidos a causas de fuerza mayor y factores ajenos a Talgo". No descarta acudir a los tribunales.

Esta sanción empañó, en realidad, otro año récord para el negocio de Talgo, que ingresó 669,2 millones de euros, un 2,5% y 17 millones más que el año previo (652 millones). La compañía achaca el aumento de la facturación por la mayor actividad industrial, alineada con los calendarios de fabricación. En consecuencia, el Ebitda cerró en negativo, con un resultado de -46,7 millones.

En relación con sus supuestos problemas de espacio para producir, la compañía asegura por primera vez que "la capacidad de producción actual está bien dimensionada para satisfacer las demandas de proyectos nuevos y existentes en tiempo y forma", pese a los rumores de nuevas sanciones por demorar entregas como la de Alemania.

Pese a ello, reconocen estar "explorando oportunidades de crecimiento industrial para abordar la fuerte demanda del mercado, siempre con foco en la eficiencia y la rentabilidad". Esta comunicación llega justo el mismo día en que uno de sus nuevos accionistas, el presidente de la Fundación Vital, haya reconocido la posibilidad de abrir una nueva planta de fabricación en el País Vasco.

Sin contabilizar la penalización, Talgo habría generado un Ebitda de 70 millones de euros, inferior a los 76,5 millones con los que cerró el 2023, y con unos márgenes inferiores a los del año pasado, situados en el 10,5%. El beneficio neto también habría caído hasta los 8,8 millones; frente a los 12,2 del año anterior.

Al mismo tiempo, el fabricante de trenes elevó su deuda por encima de lo esperado, hasta un total de 404 millones de euros, prácticamente duplicando la del año previo y multiplicando por cuatro la de 2022. Talgo achaca la situación a los retrasos en los cobros de efectivo esperados, "particularmente de Renfe", al no haber cobrado los 116 millones retenidos por la operadora en forma de sanción. También por las altas necesidades operativas de fondos, que han pasado de 385 a 515 millones para llevar a cabo su producción.

Aún así, y ante las dificultades de acceso al crédito reconocidas por sus propietarios en una carta remitida al Gobierno el pasado mes de agosto, Talgo asegura disponer de "financiación adecuada", con 300 millones de efectivo y capacidad de crédito disponible. Durante el año, elevó su plantilla un 10%, al pasar de 3.140 a 3.463 empleados.

De cara al año 2025, la compañía espera mantener sus ingresos por encima de los 600 millones, elevar su margen Ebitda al entorno del 11%, que su deuda neta se limite a un máximo de cuatro veces el Ebitda, lo que supondría reducirla al entorno de los 280 millones; y mantener el ritmo de adjudicaciones actual, después de cerrar 2024 con pedidos por 619 millones: 260 millones procedentes del pedido de trenes nocturnos de Egipto y el resto de mantenimiento.

Talgo cerró el ejercicio 2024 con una cartera de 4.173 millones de euros, cincuenta menos que la del año anterior. El 50% de ella corresponde a productos en ejecución (los 13 trenes de la serie 107 para Renfe, 79 composiciones Talgo 230 para Alemania, otras 16 para Dinamarca; y el mantenimiento de trenes en Arabia Saudí y Kazajistán). Mantiene oportunidades comerciales por valor de 11.200 millones de euros, un 70% de ellos en Europa, 17% en Oriente Medio y el Norte de África, y otro 13% en el resto del mundo.