Por qué Ryanair quiere limitar la venta de alcohol en los aeropuertos: una demanda de 15.000 euros tiene la respuesta

El pasado 9 de abril, un vuelo de Ryanair salió desde Dublín con destino Lanzarote. Sin embargo, este se vio obligado a aterrizar lejos de la isla, en Oporto, por culpa de un "pasajero problemático", define la compañía. Al tocar tierra, la policía lusa arrestó a este pasajero, pero ni el avión ni sus pasajeros pudieron completar el itinerario.

Las 160 personas que viajaban a bordo de la nave se vieron obligadas a pasar la noche en el aeropuerto de Oporto, y los costes de alojamiento y manutención corrieron a cargo de la aerolínea. Del mismo modo, Ryanair también tuvo que proporcionar un nuevo vuelo de regreso.

En consecuencia, Ryanair ha iniciado un procedimiento civil contra este pasajero problemático en el que le reclama los costes y las tasas de toda aquella cadena de calamidades. Estos, según los cálculos de la compañía, ascienden a 15.350 euros, y se desglosan de la siguiente manera: 7.000 euros en concepto de alojamiento de pasajeros y tripulación, 2.500 euros de tasas de aterrizaje y handling en el aeropuerto de Oporto y otros 2.500 euros en concepto de tasas legales de Portugal, 1.800 euros en costes de sustitución de la tripulación, 800 euros por exceso de combustible y 750 euros en concepto de pérdidas de ventas a bordo.

Tras todo este embrollo, cabe preguntarse: ¿qué hizo aquel pasajero para obligar a los pilotos a desviarse a otro país? Beber demasiado alcohol.

Dos bebidas como máximo

Este caso ha motivado a Ryanair para iniciar una curiosa campaña en la que insta a la Unión Europea a que tome cartas en el asunto, para que sucesos como este no se vuelvan a repetir. "Es hora de que las autoridades de la UE tomen medidas para limitar la venta de alcohol en los aeropuertos", considera un portavoz de Ryanair.

Según explica la compañía, muchas aerolíneas ya restringen y limitan la venta de alcohol a bordo los aviones, con el objetivo de impedir que ocurran casos problemáticos como este. Pero creen que esta medida queda sin efectividad si no se amplía a los aeropuertos, donde los pasajeros pueden beber en exceso sin ningún límite. Algo que ocurre con más frecuencia de la deseada "durante los retrasos de los vuelos"

"No entendemos por qué los pasajeros en los aeropuertos no tienen un límite de dos bebidas alcohólicas, ya que esto daría como resultado un comportamiento más seguro y mejor de los pasajeros a bordo de los aviones y una experiencia de viaje más segura para los pasajeros y las tripulaciones en toda Europa", concluye este portavoz.