Transportes y Turismo

Talgo arranca la entrega a Renfe de la segunda tanda de nuevos trenes AVE

Tren de la serie 106 en los talleres de Renfe, de estética similar a los de la serie 107.

Víctor de Elena

La operadora pública Renfe seguirá aumentando su flota de trenes este mismo año, antes incluso de lo previsto, tras comenzar a recibir de manos de Talgo los nuevos trenes de alta velocidad de la serie 107. Este segundo pedido encargado hace tres años al fabricante español a cambio de unos 300 millones de euros, está llamado a complementar de los 30 trenes Avril que ya componden la serie 106. Las estimaciones de ambas partes contemplaban comenzar a entregar los 13 trenes que lo componen a principios del próximo año, pero podría llegar al completo antes de que acabe este.

Frente a la demora que le ha costado 167 millones de euros en penalizaciones, Talgo confía en cursar esta entrega a tiempo, y de hecho ya ha entregado a Renfe la primera de las unidades de esta serie 107, para que pueda arrancar con las pruebas de fiabilidad y testeo en las vías de alta velocidad por las que circulará, sin que todavía se hayan desvelado sus posibles destinos.

El primer tren fue trasladado el pasado viernes 3 de mayo desde su fábrica de Las Matas (barrio situado en el municipio madrileño de Las Rozas) hasta la base de mantenimiento que la operadora tiene en Fuencarral (Madrid capital). Según fuentes del sector ferroviario, desde Renfe se desliza la posibilidad que estos trenes entren en servicio antes de que acabe 2024, un escenario que hasta hace poco se antojaba imposible.

Trenes reciclados

Los trenes de la serie 107, similares estéticamente a sus predecesores de la serie 106, están conformados por una composición de coches traccionados por dos cabezas motoras de nueva creación diseñadas por Talgo, que incorporan equipos de tracción fabricados por la vasca Ingeteam.

En 2021, Renfe adjudicó la fabricación de 26 cabezas tractoras, dos para cada tren, a cambio de 230 millones de euros. Estas unidades motrices están en fase de construcción, aunque "se benefician de sinergias tecnológicas al ser las 26 tractoras idénticas tecnológicamente a las de la serie 106" que ya están siendo entregados, según el fabricante.

De forma paralela, acordó un segundo contrato para reconvertir los coches que prestaban el servicio de trenhotel para acoger a los viajeros de sus nuevos AVE. Los vehículos, fabricados en 2009, conformaron varios trenes nocturnos operados por Renfe hasta que fueron cancelados por falta de rentabilidad, y luego fueron destinados a servicios diurnos en el Corredor Mediterráneo.

Al quedarse sin función, Renfe acordó la transformación de dos de estas ramas para adaptarlas a servicios de alta velocidad, ampliando su número de asientos hasta los 343 y cambiando su configuración para acoplarlos a las futuras tractoras. Ambas llegaron a ponerse en servicio dos años después, pero apenas funcionaron en servicios ocasionales.

Las otras seis composiciones también han sido ya reformadas. Tendrán 405 asientos, han sido adaptadas al interiorismo requerido por Renfe y en breve comenzarán con sus pruebas dinámicas en vía. De momento, "el proceso de certificación avanza satisfactoriamente", según Talgo, y ya han superado los testeos estáticos, que el fabricante realiza en sus instalaciones.

Capaces de llegar a cualquier destino

Este recurso también está instalado en quince de los treinta trenes de la serie 106 todavía en fase de entrega, lo que supondrá una importante ventaja competitiva para la operadora frente a sus rivales Ouigo e Iryo, quienes ven limitados sus destinos al no poder cambiar el ancho de sus trenes. Así, Renfe podrá llegar directamente hasta zonas costeras y de playa en momentos de alta demanda, como la temporada de verano, y acceder a nuevos clientes.

Una vez se anexionen las cabezas motrices a las nuevas composiciones, estos trenes podrán circular por todo tipo de vías a una velocidad máxima de 330 kilómetros por hora. Tanto las máquinas como los coches están equipados con tecnología de cambio de ancho, lo que les convertirá en un tren muy versátil para alcanzar todos los destinos de la red española que Renfe considere oportuno. Su carácter de trenes bitensión les permitirá adaptarse a cualquier tipo de electrificación, ya que están adaptados a 25 kV en corriente alterna y 3 kV en continua.

Un pedido ampliable

Los siete trenes que compondrán la serie 107 podrán ser acompañados en el futuro de seis más si Renfe finalmente ejecuta las opciones de compra fijadas en su contrato de Talgo, y que contemplan la reconversión de más composiciones a su nuevo formato, así como la adquisición de 14 cabezas tractoras adicionales, dos de ellas destinadas a reserva.

Fuentes del mercado ferroviario dan por sentado que, visto el incremento de demanda de viajeros y la ampliación de la red de alta velocidad hacia nuevos destinos como Almería, el País Vasco, Navarra o el Corredor Mediterráneo, Renfe necesitará de nuevas unidades para expandir sus servicios y ajustar su flota a la creciente demanda de viajeros que viene registrando el ferrocarril en los últimos años.

Fe de errores: Se han corregido las cifras del número de trenes que compondrán la flota.