Alstom, CAF e Hitachi pujan por los nuevos trenes para Metro de Madrid

El primero de los dos lotes que conforman el pedido de nuevos trenes de Metro de Madrid valorado en más de 1.000 millones de euros ha atraído el interés de los tres grandes fabricantes de suburbanos en Europa. La vasca CAF (Construcciones y Auxiliar de Ferrocarriles), la filial española de la francesa Alstom y la italiana Hitachi Rail se han postulado oficialmente a la primera parte del concurso lanzado por la empresa pública madrileña, concretamente al relativo al suministro de trenes de gálibo ancho para las líneas más modernas de su red, y que está valorado en 480 millones de euros.

Este lote contempla el diseño, fabricación, suministro y puesta en marcha de 40 trenes de gálibo ancho monotensión que serán destinados para las líneas 6 y 8. Todos los trenes estarán compuestos por 6 coches, de los cuales cuatro serán motores y otros dos remolques. Este lote podrá ampliarse en el futuro en otros 100 millones de euros en caso de que se considere necesario. El segundo lote, para trenes de gálibo estrecho, está también en tramitación, sin que se hayan desvelado los participantes.

Un pedido dividido en dos

Dadas las diferencias existentes en la red, la gestora del suburbano madrileño optó por partir el contrato de suministro de trenes en dos lotes similares, uno para las líneas de gálibo estrecho y otro para las de gálibo ancho. Estos se repartirán entre las líneas 6 y 8, para aumentar la capacidad de las mismas, mientras que la extensión del contrato se reserva para cubrir la futura ampliación de la red entre Plaza Elíptica y Conde de Casal.

Los trenes de ancho estrecho se destinarán todos a la línea 1, la más antigua y centenaria de la red, con el objetivo de sacar de la circulación las series 2000B y 5000, con más de 30 años de antigüedad. Con esta compra, el suburbano madrileño espera reforzar la calidad de los viajes, la eficiencia energética y lograr una mayor capacidad en el transporte público. Estas nuevas unidades podrían entrar en servicio a finales de 2026.

De esta forma, el megapedido encargado por la Comunidad de Madrid contempla destinar un total de 1.094 millones de euros a la compra de 80 nuevos trenes para proceder a la renovación de flota y destinar los trenes a las futuras ampliaciones.

Para llevar a cabo la adquisición, el gobierno de Isabel Díaz Ayuso autorizó el pasado octubre a Metro a aumentar su endeudamiento en 1.378 millones de euros, una adquisición que también será financiada con préstamos del Banco Europeo de Inversiones (BEI), que aportará 470 millones.

Experiencia previa en Metro

CAF es uno de los grandes clientes de Metro de Madrid y a día de hoy, la gran mayoría de la flota que circula por su red ha sido suministrada por la fabricante vasca, convirtiéndose en la favorita para hacerse con el pedido. En concreto, ha diseñado y fabricado los trenes de las series 2000, 3000, 5000, 6000 y 8000, que circulan por las líneas 1, 2, 3, 4, 5, 6, 8, 9 y 12. Suministró su último pedido a Metro de Madrid en los años 2010 y 2011, cuando hizo entrega de las unidades de la serie 8400, que actualmente prestan servicio en la línea 6.

Hitachi Rail también tiene presencia en el suburbano madrileño, pero no de forma directa, sino a través de Ansaldobreda, compañía adquirida por el grupo japonés con sede en Londres en 2015. Para poder cubrir las ampliaciones de la red de Metro a los municipios de la periferia de la capital, la Comunidad de Madrid encargó a principios de siglo el diseño y fabricación de nuevos trenes a la antigua empresa italiana.

Así, en 2002 se le encomendó la construcción de 30 trenes de la serie 7000 que entraron en servicio el año siguiente. Este modelo evolucionó posteriormente con un pedido adicional de otros 7 trenes bitensión que conformaron la subserie 7400. Para hacer frente a las ampliaciones de la siguiente legislatura, Metro encargó otros 52 trenes a Ansaldobreda que, con prestaciones mejoradas, se convirtieron en la serie 9000 repartidos en tres subseries distintas, empezando a circular en 2006. Estas series circulan por las líneas 6, 7, 9, 10 y 12.

De su lado, la presencia de Alstom es mucho más minoritaria, aunque colaboró en el montaje de los trenes de las series 6100 y 8000, diseñados conjuntamente con CAF. El segundo de estos contratos, firmado en el año 2000, abarcó el suministro de 47 unidades de tres coches pensados para dar servicio principalmente en la línea del aeropuerto, la línea 8, por los que actualmente todavía circulan.

En declaraciones a este medio, aseguran haber trabajado los últimos meses para presentar "la mejor oferta, asentada sobre raíces madrileñas, con más de 1.500 empleados en la región". La filial española, con sede en Cataluña, confía en su experiencia internacional, con metros en más de 70 ciudades, para llevarse el proyecto.