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Michael Hall, el biólogo que revolucionó los estudios sobre longevidad: "En la década de los 70 nadie hablaba de envejecimiento como hoy"
- El descubrimiento del gen TOR resultó clave para el desarrollo de fármacos contra algunas enfermedades
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elEconomista.es
Michael Hall es uno de los descubridores en la década de los 90 de un gen que actúa como interruptor en la célula, regulando su crecimiento y metabolismo en respuesta a los nutrientes que la rodean, lo que influye en los procesos celulares que tienen lugar a medida que envejecemos, según recoge SWI swissinfo.ch.
Hace más de 30 años este biólogo molecular de la Universidad de Basilea descubrió este gen denominado TOR, que fue clave para el desarrollo de fármacos contra el cáncer, como la rapamicina y también promueve el campo de la longevidad. Aun con todo, Hall atribuye su propia vitalidad y salud al "ejercicio, buena dieta, interacciones sociales y, posiblemente, buenos genes", declaró.
Desde entonces, diversos estudios han demostrado que la rapamicina alarga la vida de múltiples especies animales. Sin embargo, su primer contacto con el ámbito de la longevidad comenzó cuando se planteó el objetivo de lograr vivir hasta los 100 años, para lo que pretendía entrevistar y examinar "centenarios vigorosos". "Era la década de 1970. Nadie hablaba del envejecimiento como hoy".
Los inicios
Aunque su proyecto no resultó muy provechoso, puesto que algunas de las personas entrevistadas habían mentido o estaban confusas con sus edades, fue el germen que hizo que se interesase por el envejecimiento. Es a partir de entonces cuando comienza a interesarse sobre cómo se transporta una proteína del núcleo de una célula, un fenómeno relacionado con enfermedades como el cáncer, las infecciones víricas y los trastornos neurodegenerativos.
Un primer hallazgo fue publicado en 1991 en la revista Science e identificó los genes TOR1 y TOR2 que al mutar eran resistentes a los efectos de la rapamicina en las células. "Mirando atrás, parece que no se conociera este aspecto fundamental de la biología. Hay tantas enfermedades como el cáncer que se basan en un crecimiento celular aberrante", afirma Hall.
Así funcionan los fármacos antienvejecimiento
A raíz de este descubrimiento, las empresas farmacéuticas desarrollaron una serie de fármacos contra el cáncer. De esta manera, cuando TOR se ralentiza al tomar un fármaco como la rapamicina o al ayunar, se potencia un proceso de limpieza de la célula, llamado autofagia, que contribuye a la eliminación de las células dañadas acumuladas.