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Las tres fuentes de proteína más importantes para mantener la masa muscular a partir de los 50 años
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elEconomista.es
Una buena masa muscular a partir de los 50 años es fundamental para conservar un buen estado físico y ser lo más independiente posible en edades avanzadas. Más allá de la práctica habitual de deporte y una dieta sana y equilibrada, incrementar la ingesta diaria de proteínas a partir de fuentes de calidad puede ser de gran ayuda.
A partir de la tercera edad, se produce la llamada resistencia anabólica, es decir, la incapacidad del cuerpo para producir masa muscular, a pesar de que se lleve a cabo una dieta adecuada y la práctica habitual de ejercicio. Según el Standford Center of Longevity, por este motivo las personas mayores necesitan más proteína por cada ración de comida que los adultos jóvenes, concretamente se recomienda consumir entre 1,2 y 1,6 gramos de proteína por kilogramo de peso corporal.
Una de las mejores fuentes de proteína es el yogur, especialmente el natural o griego. Además, es un alimento muy versátil que puede consumirse de formas muy diversas, por ejemplo, mezclándolo con frutas, cereales o frutos secos. Por otra parte, otra de las fuentes más asequibles de proteína son los huevos, que además aportan vitaminas, minerales y antioxidantes.
Pescado en conserva
En último lugar se encuentra el pescado, donde una de las formas más económicas y saludables de consumirlo es sus versiones en conserva. Productos como las sardinas, el atún o la caballa son además una fuente de proteína y ácidos grasos omega-3, con grandes beneficios para la salud del corazón y del cerebro.
En general, las proteínas son esenciales para ayudar al cuerpo a reparar las células y a producir células nuevas, de ahí que sean especialmente importantes para niños y mujeres embarazadas. En cualquier caso, si se pretende incrementar la ingesta de proteínas o bien introducir nuevos alimentos, lo ideal es consultar con su nutricionista o médico con el fin de que implemente una dieta lo más acorde a sus necesidades.