El ayuno intermitente ayuda a perder más kilos que una dieta baja en calorías

El ayuno intermitente se basa en la limitación del tiempo en el que se ingieren alimentos a lo largo del día, lo que indirectamente implica la reducción del número total de calorías, aunque esto puede no darse en todos los casos. Por ello, esta práctica se ha popularizado en los últimos años con el objetivo de perder peso.

Los tipos de ayuno que pueden hacerse son muy variados, desde uno de los más conocidos, como es el 16/8 —se come durante 8 horas y se ayuna las otras 16—, hasta la dieta 5:2, en la que se lleva a cabo una alimentación normal durante los 5 días de la semana y en los 2 restantes se reducen drásticamente el consumo de calorías a 500 o 600.

Un estudio realizado por Nutrimedia, el Observatorio de la Comunicación Científica de la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona (UPF) y el Centro Cochrane Iberoamericano ha probado que existen evidencias con certeza moderada de que las personas con exceso de peso logran perder algo más de un kilo a medio plazo que con una simple dieta baja en calorías. "La limitación de las horas del día durante las que se realizan las comidas parece potenciar ligeramente el efecto adelgazante de la simple reducción de las calorías en la dieta", explica el principal autor de la investigación, David Rigau.

Se desconoce si su efecto dura a largo plazo

"Cuanto todas las comidas se realizan solo las primeras horas del día, por ejemplo entre las 7 y las 15 horas, los estudios muestran que el efecto adelgazante es todavía ligeramente mayor que en otras formas de ayuno intermitente", afirma Rigau.

El estudio ha analizado diversos ensayos clínicos y los efectos sobre el peso en las distintas modalidades de ayuno intermitente en comparación con una dieta baja en calorías sin restricciones horarias. Se ha llevado a cabo un seguimiento de los participantes durante entre 4 semanas y 12 meses, aunque se desconoce si esto tiene un efecto a largo plazo, así como sus posibles efectos perjudiciales.

El ayuno intermitente presenta gran fama también por sus posibles beneficios para la salud, tanto cardiovascular como metabólica —control del azúcar y colesterol en sangre—, y por la mejora del bienestar general —mayor longevidad y reducción de la inflamación—, aunque se trata de indicios apenas estudiados.