Salud Bienestar
La semilla que favorece la pérdida de peso, reduce el cansancio y aumenta la masa muscular
- Las semillas de girasol son una de las fuentes más importantes de grasas saludables que debemos incorporar en nuestra dieta
- La semilla que ayuda a fortalecer los huesos y es una fuente de magnesio y calcio
- Lo que puede ocurrir a tu cuerpo si comes semillas de chía todas las semanas
Raúl González Pérez
Las semillas de girasol, que están muy de moda en la actualidad, aportan numerosos beneficios para la salud, ayudando a proteger la salud del corazón, combatiendo el estreñimiento, favoreciendo el aumento de la masa muscular y cuidando la salud del cerebro.
También conocidas como pipas o maravillas, estas semillas poseen todos estos aspectos positivos debido a que contienen una gran variedad de grasas saludables, proteínas, fibras, vitamina E, selenio, cobre, fitoquímicos, ácido fólico, hierro y zinc.
Beneficios
Entre sus propiedades, cabe destacar las siguientes:
- Favorecen la pérdida de peso. Las fibras necesitan mayor tiempo para ser digeridas, disminuyendo el proceso de vaciado gástrico, aumentando la sensación de saciedad y disminuyendo el apetito.
- Aumentan la masa muscular. Sí, por poseer un elevado contenido en proteínas.
- Protegen la salud cardiovascular. Al ser ricas en grasas mono y poliinsaturadas -grasas buenas-, las semillas de girasol ayudan a proteger la salud cardiovascular, debido a que regulan los niveles de colesterol total.
- Ayudan a combatir el estreñimiento. Debido a la gran cantidad de fibras en su composición, las semillas ayudan a este proceso.
- Reducen el cansancio. Son ideales para tener más energía y vitalidad, además de para no quedarte dormido en cualquier lado.
- Mejoran el aspecto de la piel. Tienen una buena cantidad de vitamina E, que nutre y rejuvenece la dermis.
- Disminuyen la ansiedad y el insomnio. Es rica en magnesio y triptófano, nutrientes que son importantes para la producción de la hormona serotonina.
La manera de consumirlas
Cabe destacar que las semillas de girasol pueden ser consumidas al natural, como un snack, o en las ensaladas, pasteles, batidos, jugos, en una ensalada de grutas, en los cereales, granolas y yogures, por ejemplo. Para comerlas, se debe llevar la semilla a la boca, romper la cáscara con los dientes y extraer la semilla, debiendo evitar consumir la cáscara.
La porción recomendada por día es de un cuarto de taza, que equivale a 30 gramos. Y, lo ideal, es consumir la versión que no tiene sal.
Recomendaciones
Como todo, en exceso, es malo. Comer demasiadas semillas de girasol podrían causar alguna alergia, sin embargo, no es muy común. Y es que en algunas ocasiones se han dado síntomas como erupciones cutáneas, hinchazón y picazón de la boca e incluso anafilaxia.