Salud Bienestar
Cómo saber si un huevo es fresco sin abrirlo: el mejor truco
- Los huevos son una fuente de nutrición muy valorada en todo el mundo, ofreciendo una gama de ventajas que a menudo pasan desapercibidos
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Raúl González Pérez
El huevo es un alimento imprescindible en cualquier nevera de España. Y es que se puede utilizar para preparar una tortilla, un revuelto, con unas tostadas en un desayuno de esos que están tan de moda en los últimos meses, echarlos en ensaladas, en sopas, cremas...
Debido a su composición única, los huevos ocupan un lugar destacado en mesas de todo el mundo. Es más, su combinación de proteínas de alta calidad, vitaminas esenciales y minerales clave los convierten en un recurso muy valioso para la salud y el bienestar.
Beneficios
Entre sus propiedades, cabe destacar las siguientes:
- Fuente de proteínas de alta calidad. Cada huevo contiene aproximadamente 6 gramos de proteína, una cantidad muy significativa para contribuir a las necesidades diarias de este macronutriente.
- Rico en vitaminas y minerales. Están repletos de una amplia gama de vitaminas y minerales esenciales para la salud. De hecho, son una fuente de vitamina B12, contienen vitamina A, vitaminas del complejo B, minerales como el selenio, zinc, hierro...
- Contribuye a la salud ocular. Los antioxidantes son compuestas que ayudan a proteger las células del daño causado por los radicales libres.
- Fuente de colina para la salud cerebral. Poseen un alto contenido en colina, un nutriente esencial que desempeña un papel vital en la salud del cerebro y el sistema nervioso.
- Promueve la saciedad y control del apetito. Son una gran opción cuando se trata de promover la saciedad y controlar el apetito.
- Mejora la salud muscular y el rendimiento deportivo. Ayuda a mantener y aumentar la masa muscular, en especial cuando se combina con un programa de entrenamiento de resistencia correcto.
A tener en cuenta
Como todos los alimentos, cuantos más frescos, mejor. Ahora bien, aunque no estén todo lo frescos que deberían no quiere decir que no se puedan consumir. De hecho, se pueden consumir sin ningún temor a partir del primer mes, donde comienzan a perder algunas de sus propiedades.
Para saber si un huevo está fresco -y también si está fresco o si no está fresco pero todavía se puede consumir-, tienes que meterlo en un vaso con agua y ver si flota o no flota. Si se hunde y se queda en posición horizontal, quiere decir que el huevo está fresco.
Si se hunde, pero queda inclinado o queda en vertical, quiere decir que el huevo no está fresco, pero sí se puede consumir. Por último, si el huevo se queda flotando en la parte superior del vaso, solo hay una alternativa: descartarlo directamente ya que no está apto para el consumo.