Las personas que miden menos de esta altura podrían vivir más años, según algunos estudios científicos
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elEconomista.es
En algunas personas, una estatura muy alta o muy baja puede ser sinónimo de complejo. Este tipo de estigmas son creados a partir de una serie de creencias sociales. No obstante, en el caso de las personas consideradas "bajitas" podrían tener una ventaja con respecto a las que son más altas, puesto que un estatura reducida podría conllevar mayor esperanza de vida.
Esta afirmación tiene una explicación lógica y es que, las personas que son más pequeñas, tienen una cantidad de células menor, lo que implica también una menor probabilidad de que estas células lleguen a enfermarse. Todo esto podría hacer que las personas de baja estatura vivan más años que las personas de mayor estatura.
Un estudio realizado en 2012 con hombres nacidos en un pueblo de Cerdeña entre 1866 y 1915, llegó a la conclusión de que una vez llegaban a los 70 años, los hombres más altos vivían dos años menos que aquellos que tenían una menor estatura. Concretamente, aquellos participantes que medían menos de 1,61 metros su esperanza de vida era mayor que aquellos que superaban esa media.
Otros estudios
Otro estudio realizado más tarde, en 2017, examinó la estatura y la esperanza de vida de más de 3.000 jugadores de baloncesto vivos y fallecidos, que jugaron entre 1946 y 2010. Los resultados también coincidieron con el estudio anterior, observando que aquellos que murieron más jóvenes eran también los más altos de entre sus compañeros.
Cabe destacar que ambos estudios muestran algunas limitaciones, ya que no tienen en cuenta otras variables como el peso o el estilo de vida de estas personas. No obstante, el crecimiento de células puede dar lugar a una mayor estatura, así como un mayor riesgo de padecer algún tipo de cáncer.
Un particular ejemplo de esto es el que se da en la isla de Okinawa, frente a la costa de Japón, la cual ha tenido históricamente la esperanza de vida más larga del mundo (78 años para los hombres y hasta 88 en mujeres), un 40% menos de riesgo de sufrir enfermedades cardíacas o cáncer y el mayor número de personas centenarias. Como particularidad, la altura media de este lugar era de 1,50 metros.