Salud Bienestar
Grifols llevará al mercado el nuevo medicamento de Biotest a finales de año
- El mercado potencial del tratamiento es de 750 millones de euros
Javier Ruiz-Tagle
Madrid,
Grifols ha recibido buenas noticias de su última gran adquisición en el mercado: Biotest. La firma alemana, por la que la empresa de hemoderivados pagó 2.000 millones de euros, ha anunciado resultados positivos en el último ensayo clínico de una de sus dos promesas terapéuticas, el fibrinógeno. Si las cifras provisionales se confirman, algo que esperan ambas compañías, el camino hacia la comecialización del medicamento, que sirve para frenar hemorragias, se producirá a finales de este año.
El medicamento llega a un mercado donde existen dos terapias que se usan para el mismo fin: detener una pérdida de sangre abundante durante una operación. Según explica Grifols, la ventaja que proporciona su medicamento y, por tanto, el motivo por el que creen que se harán con el mercado, es que el nuevo fármaco es una terapia dirigida, por lo que es más eficiente y rápido en su actuación. En cualquier caso, en el ensayo clínico se ha demostrado que la eficacia es idéntica a los tratamientos estándar.
El mercado global al que aspira la farmacéutica catalana asciende a 750 millones de euros. Grifols comenzará la fase regulatoria tanto en Estados Unidos como en Europa, si bien la historia de ambas agencias es distinta. La FDA resuelve antes que la EMA los expedientes de aprobación de medicamentos. Además, la aprobación en el Viejo Continente no es sinónimo de financiación en todos los estados. Una vez conseguido el visto bueno de la EMA, la firma de hemoderivados deberá ir país por país en busca de un acuerdo que permita usar el medicamento.
"Los resultados positivos del fibrinógeno de Biotest son un hito importante y refuerzan una estrategia de innovación en Grifols diversificada en plasma y no plasma, equilibrada entre inversiones internas y externas, y que incluye ciclos de desarrollo tanto a corto como a largo plazo", añade Víctor Grifols Deu, Chief Operating Officer de Grifols.
La compra de Biotest estaba fundamentada en aumentar la capacidad de centros de donación de plasma en Europa, además de surtirse de una cartera de medicamentos que estaban en fases avanzadas de investigación. Sin embargo, a causa de la crisis de deuda, la compañía lanzó un plan de ajuste en el que además de despidos, también se clausuraron medio centenar de estas instalaciones en todo el mundo.
La noticia ha cogido al mercado frío. Sobre las 13:00 horas de este miércoles la acción recogía un crecimiento del 0,58%. En cualquier caso, la farmacéutica catalana se está recuperando tras el fuerte golpe bursátil que supuso el ataque de Gotham City, quien a puesto en tela de juicio las cuentas de la firma.