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Grifols descarta desinvertir en otros activos más allá de Shanghai Raas

  • La compañía confía a su crecimiento orgánico el músculo para reducir deuda
Sede de Grifols

Javier Ruiz-Tagle
Madrid,

Grifols no venderá más activos para reducir deuda una vez complete la desinversión en Shanghai Raas, por la que espera obtener unos 1.500 millones de dólares. Ahora, los planes de la farmacéutica catalana pasan por impulsar su negocio orgánico para cumplir con el objetivo comprometido con los accionistas de que la ratio de apalancamiento solo supere al Ebitda cuatro veces. Así se lo transmitió la junta directiva de Grifols a sus inversores tras haber presentado las cuentas correspondientes a los primeros nueve meses del año. "Ahora estamos centrados al 100% en firmar la transacción con China y de hecho no estoy mirando nada más. Creemos que el desapalancamiento orgánico, combinado con la transacción, nos llevará al objetivo que nos fijamos para 2024", explicó el presidente, Thomas Glazmann, a Morgan Stanley.

Las dudas de los inversores radican en que Grifols había deslizado en alguna ocasión que el área de Diagnóstico de la compañía podría estar en la cartera de desinversiones para reducir la deuda. Ahora, tras las palabras de Glanzmann, está descartado. Eso sí, el dirigente quiso dejar claro que la venta de una parte importante de las acciones de Shanghai Raas no es un paso para abandonar el país asiático. "Quiero recordar que tenemos una alianza estratégica con Shanghai RAAS y tenemos una distribución de albúmina, ambos son muy importantes para nosotros y también nuestra posición futura en China es importante para nosotros", le explicó Glanzmann a Citi.

Los inversores de la compañía trasladaron a los directivos cierta intranquilidad por la demora en el cierre de la operación de Shanghai Raas. Desde la farmacéutica se transmitió tranquilidad, argumentando que China no presenta las mismas condiciones que Europa o Estados Unidos a la hora de cerrar una operación. Con todo, aseguraron que el nombre del comprador se conocería antes de que acabe el presente año, si bien se explicó que no será hasta entrado el primer semestre de 2024 cuando se complete la operación.

Grifols tiene en mente ahora que el negocio orgánico de la compañía comience a engordar los ingresos. Una de las palancas de crecimiento está en el precio del plasma y en los márgenes que ahora consigue la farmacéutica, que han aumentado respecto al comienzo de la década. Dentro de los nuevos ingresos que llegarán a Grifols se encuentra una planta que se ha comenzado a construir en Canadá, país con el que Grifols tiene un acuerdo hasta principios de la década que viene para suministrar plasma al sistema sanitario. "Podemos esperar ver algo de producción de esta instalación durante 2025", le dijo Víctor Grifols a Banco Santander.

Por último, la compañía también quiso trasladar cuáles son sus planes de expansión dentro de un contexto de reducción de deuda como principal objetivo. "Según el próximo crecimiento de las ventas y nuestras proyecciones, esperamos que la próxima ola de expansión de CapEx tendrá lugar en 2028. Por lo tanto, tenemos un camino claro de menor gasto desde ahora hasta 2028", dijo el director financiero de Grifols, Alfredo Arroyo, ante las preguntas de Alantra.