Ibuprofeno o Paracetamol: ¿qué es más eficaz para aliviar el dolor de espalda?
Sergio Guinaldo, Europa Press
Ante la aparición de un dolor o molestia, es recurrente ver cómo muchas personas acuden al botiquín casero en busca de un remedio automedicado. Lo más común, recurrir al Paracetamol o al Ibuprofeno, en función del tipo de dolor que se experimente.
Una revisión de estudios, publicada en la revista Drugs & Aging, ha tratado de determinar qué medicamento o medicamentos son más eficaces para calmar el dolor de espalda.
"La mayoría de las personas mayores experimentan dolor de cuello o de espalda baja en algún momento, lo suficientemente molesto como para ver a su médico. Nuestros hallazgos brindan una guía de medicamentos útil para que los médicos la usen para el dolor de columna en una población de mayor edad que puede tener un historial médico complejo", ha explicado el autor de dicha revisión, Michael Perloff, profesor asistente de neurología en la facultad de medicina de la Universidad de Boston.
Así, Perloff y su equipo han determinado que los antiinflamatorios no esteroideos (como el ibuprofeno) son más efectivos para el dolor relacionado con la columna, si bien el paracetamol también es seguro en adultos mayores.
Otros medicamentos
La revisión, dirigida a especialistas más que al conjunto de la ciudadanía, también ha analizado el papel de otros medicamentos, como antidepresivos, analgésicos o relajantes musculares.
Los medicamentos para el dolor nervioso (como gabapentina y pregabalina) se pueden usar en personas mayores, con precaución en cuanto a la dosis y la función renal, ya que pueden causar mareos o dificultad para caminar, pero pueden tener algún beneficio para el dolor de los nervios del cuello y la espalda (como la ciática) en adultos mayores.
Los antidepresivos más nuevos (como duloxetina) pueden ayudarmás que los más antiguos (nortriptilina) para el dolor relacionado con la columna, prestando atención a la posible sedación y mareos.
En el caso de algunos relajantes musculares, como carisoprodol, clorzoxazona, ciclobenzaprina, metaxalona, metocarbamol y orfenadrina, deben evitarse en adultos mayores debido al riesgo de sedación y caídas. Otros (tizanidina, baclofeno, dantroleno) pueden ser útiles para el dolor de cuello y espalda, con mayor evidencia para la tizanidina y el baclofeno. Estos deben usarse en dosis reducidas, evitando la tizanidina con enfermedad hepática y reduciendo la dosis de baclofeno con enfermedad renal.