Retail - Consumo

La industria del cava se juega 18 millones de botellas con los aranceles de Estados Unidos

  • Se trata del tercer mercado del sector a nivel mundial, solamente por detrás de España y Bélgica 
  • Se moviliza a nivel europeo junto con otras D.O y asociaciones con tal de defender sus exportaciones 
Una copa de cava. EE

Carles Huguet
Barcelona,

El mundo del cava parece predestinado a no vivir un año tranquilo. Si la campaña de 2024 estuvo marcada por la sequía, este 2025 la amenaza de unos aranceles del 200% en Estados Unidos empaña la llegada de las lluvias de los últimos meses. Las tasas llegan además de un mercado estratégico para el sector: el tercero más importante con alrededor de 18 millones de botellas, solo por detrás de las ventas en España y en Bélgica.

El presidente de la D.O. Cava hizo este martes un primer balance de los posibles aranceles con los que amaga Donald Trump. "El cava es un producto de ocio, no estratégico, por lo que no creemos que deba estar sometido a aranceles" lamentó. En los últimos años, numerosas bodegas, como Codorníu o Freixenet han apostado fuerte por el mercado, que representa algo más del 8% de los 218 millones de botellas vendidas a lo largo de 2024.

Si el cálculo se extrapola sobre el total de las ventas -es complicado pues el precio medio puede cambiar por países- la cifra económica en jaque ronda los 180 millones de euros.

"¿Qué pasará? Por ahora no lo sabemos. Desde las últimas declaraciones no se ha movido nada", recordó. Y remarcó: "Unos aranceles del 200% son muy altos, pero repercutirán sobre otros espumosos –en referencia al champagne y al prosecco, por ejemplo-, así que veremos que hace el consumidor". "El impacto será importante", remató.

El ejecutivo, no obstante, llamó a las bodegas a mantener su presencia en el país en el largo plazo. "Quizás no es el momento de lanzar una gran inversión, pero no hay que abandonar Estados Unidos, porque recuperar la presencia costará", comentó.

Por ello, la D.O. Cava está en conversaciones con otras denominaciones de origen europeas y asociaciones de fabricantes con tal de hacer lobby a favor de sus intereses en Bruselas. "Ya se está en contacto con la Comisión Europea, no solo desde España, también los jugadores de otros países afectados, como Italia y Francia", añadió.

La amenaza de Trump llega en un contexto de caída de ventas para la industria, muy afectada por la falta de producto por la sequía. La falta de uva llevó a Freixenet, el mayor productor, a dejar de vender este espumoso en Alemania y Austria y sustituirlo por un vino alternativo. Por ambos factores, las ventas cayeron un 13,39%: solo el 3,5% a nivel nacional, pero un 18% a nivel internacional.

Por valor, el descenso fue inferior y pasó de 2.371 millones de euros de facturación a 2.270 millones de euros. Se debió a un incremento del 11% del precio de cada botella, quedando en una media de 8,41 euros.